En los tiempos de electrificación que vivimos, cada vez resulta más complicado conducir coches de enfoque deportivo sin que en ellos esté presente el aspecto electrificado. Y por supuesto, la 'nueva' Opel de Stellantis no es una excepción.
De hecho, si tus referencias en la marca son los antigups modelos GSi y OPC, olvídate de ellos, porque ahora los Opel más enfocados a disfrutar de la conducción se llaman GSe... como puedes comprobar en el Opel Astra GSe de esta prueba.
¿El motivo? Por un lado, tenemos el origen clásico de esta denominación, ya empleada en modelos de hace décadas, como el Commodore GSE de 1968 o el Monza GSE de los años 80. Por el otro, un restomod 100% eléctrico como el Opel Manta GSe Elektromod de 2021, que levantó gran expectación por su diseño retro... y que ha servido de germen para lanzar una nueva gama de producto.
Es más, bajo el sello GSe, la marca alemana ha llegado a afirmar que quiere crear una "nueva submarca", en las que los protagonistas son por el momento los Opel Astra (5 puertas y Sports Tourer) y Grandland, con 225 CV de potencia, para los primeros, y con 300 CV y tracción total, para el SUV.
El Opel Astra GSe 2023, en cinco puntos clave:
Diseño
Desde el punto de vista estético, en este Astra GSe de cinco puertas, no hay ningún elemento que llame la atención en exceso, más allá del frontal Opel Vizor o la fina tercera luz de freno, en formato vertical. De hecho, en líneas generales, el resultado final es bastante discreto.
Tomando como base el acabado GS-Line de la gama convencional, el Astra GSe incorpora detalles específicos, como el logo de la versión, las llantas de aleación de 18 pulgadas Commodore o el paragolpes delantero y difusor trasero de diseño exclusivo.
Todo, en nuestra unidad de color blanco, complementado por detalles negros en contraste, como pueden ser las propias llantas, el techo o las carcasas de los retrovisores.

Interior
En el caso del Astra, hablamos de un modelo que roza los 4,4 metros de largo y que se construye sobre la última evolución de la plataforma EMP2 de Stellantis, la misma que también emplea el Peugeot 308, por poner un ejemplo. Eso sí, en este caso, me siento más cómodo en este habitáculo que en el del modelo francés. Pero vayamos por partes...
El Astra recurre a una de las principales señas de identidad en la marca en los últimos tiempos, como es el 'Pure Panel', o lo que es lo mismo, una configuración de doble pantalla de 10,0 pulgadas en el salpicadero, para la instrumentación y el sistema multimedia.



Centrándonos en la pantalla del infoentretenimiento, en ella se integran funciones como el navegador, el climatizador, la imagen de la cámara trasera... Pero es cierto que, a su favor, debemos indicar que no se renuncia a los mandos físicos, ya que, justo debajo, hay varios accesos directos, que facilitan el manejo, reduciendo las distracciones.
Otro clásico de Opel son los asientos con certificación AGR, que para la ocasión, son de corte deportivo y lucen el logo 'GSe' bajo el reposacabezas. Asientos que resultan cómodos y con los que es sencillo encontrar rápido una buena posición al volante.
¿Espacio interior? Pues detrás es correcto para dos adultos, aunque en este apartado, no es el líder de la categoría. Mejor nota obtiene el maletero, con 352 litros (70 menos que las versiones con motor térmico).

Mecánica
Como ya hemos adelantado, el Opel Astra GSe de esta prueba es un híbrido enchufable, con etiqueta 0 de la DGT, en el que la base del sistema es un motor 1.6 turbo de gasolina, con cuatro cilindros y 180 CV de potencia. Tren de propulsión que se completa con una batería de 12,4 kWh de capacidad, una unidad eléctrica de 110 CV y el cambio automático con embrague multidisco e-EAT8, de ocho velocidades. Todo, para ofrecer una potencia máxima combinada de 225 CV.
En términos de prestaciones, el compacto alemán anuncia 225 km/h de velocidad máxima (que son 135 km/h, en modo 100% eléctrico), un 0 a 100 km/h en 7,5 segundos y hasta 64 km de autonomía eléctrica. ¿Tiempo de carga de la batería? 1 hora y 55 minutos, en un punto de 7,4 kW.

En marcha
Un detalle importante sobre el sistema híbrido es que ofrece tres modos de conducción, acorde a las necesidades de cada momento: Sport, Normal y Electric. Y del mismo modo, cuenta con la denominada función e-Save que, permite reservar o generar carga de batería para circular con ella cuando lo necesitemos.
Respecto a la puesta a punto específica del chasis de esta versión, la altura al suelo del conjunto se reduce en 10 milímetros y la dirección también estrena configuración, resultando un 9% más rápida. Y lo cierto es que, en marcha, sí que se percibe más reactiva, transmitiendo bastante información al conductor.
Pero los cambios no terminan ahí, ya que el Opel Astra GSe tiene más cambios en la suspensión, de la mano de los amortiguadores Koni FSD (Frequency Selective Damping), que seguro que te suenan del anterior Corsa OPC o del Abarth 500, y de unos muelles un 11% más firmes que en el modelo convencional.

Basta ponerse en marcha (algo que hará en modo eléctrico, siempre que pueda) para darse cuenta de que este GSe es más un GT que un deportivo de raza. Conclusión a la que se llega al comprobar que se trata de un coche bastante noble y confortable, perfecto para usar en el día a día.
Ahora bien, sí que es cierto que la sensación de aplomo es bastante elevada y que demuestra agilidad en los cambios de dirección. Aunque también es verdad que, superar los 1.700 kilos de peso, juega en su contra. ¡Bendito apoyo de la parte eléctrica!
Otro detalle que te 'engancha' a la conducción es el hecho de poder manejar el cambio con las levas y que estas no se empleen para gestionar la regeneración del sistema. En esta caso, para gestionar esa recuperación de energía, se puede hacer a través del modo 'B' del cambio.
¿Y el consumo? Pues como suele suceder en los vehículos PHEV, hay que matizar el gasto medio homologado, que está entre 1,1 y 1,2 l/100. ¿Por qué? Pues porque si haces 50 o 55 km diarios y recargas a menudo, tu consumo se quedará fijo en 0 litros. En cambio, si no puedes cargar en unos días y vas usando el motor de gasolina, lo normal es estar entre los 5 y los 6 l/100 km.

Equipamiento y precio
Disponible en las mencionadas carrocerías de cinco puertas y familiar (que potencia enormemente el aspecto práctico, con un maletero por encima de los 500 litros), el precio del Astra GSe arranca en los 42.100 euros, sin contar con descuentos o con la ayuda del Plan MOVES III para los PHEV, que puede llegar a ser de hasta 5.000 euros.
Y en términos de equipamiento, además de todo lo que se ha comentado a lo largo de la prueba, hay que hacer mención a una amplia dotación de serie en términos de asistentes a la conducción, como pueden ser los sistema de frenada de emergencia, de mantenimiento de carril, de reconocimiento de señales de tráfico o la cámara Intelli-Vision, por citar algunos ejemplos.
Opel Astra GSe 5p