La nueva familia GSe (Grand Sport electric) de Opel, con modelos electrificados que destacan en prestaciones y dinámica de conducción, se amplía con un nuevo representante. Si el primero fue el Astra, un PHEV con 225 CV combinados, ahora es el turno del Opel Grandland GSe 2022.

Este SUV compacto también emplea un sistema híbrido enchufable, pero con 300 CV y tracción 4x4, con el que por supuesto porta la etiqueta 0 de la DGT. El módulo de propulsión está conformado por un motor turbo de gasolina con 1,6 litros y 200 CV, más una unidad eléctrica delantera de 110 y otra trasera de 113. 

Como puedes ver en las fotos, la estética del coche es netamente deportiva. Su rasgo más distintivo es el capó de color negro, que será opcional. También destacan las llantas de aleación de 19 pulgadas, inspiradas en las del Manta GSe, así como un difusor trasero y la inscripción GSe en el portón.

Galería: Opel Grandland GSe 2022

Altas prestaciones y bajos consumos

En el interior, el conductor y el pasajero disfrutarán de unos exclusivos asientos con certificación AGR y tapizados en Alcántara, que prometen una buena sujeción y también un diseño ergonómico para el día a día. Por su parte, el maletero se ve reducido a 390 litros. 

Como buen PHEV, el Opel Grandland GSe 2022 combina bajos consumos (con la batería cargada) y altas prestaciones. En concreto, declara 1,3 litros cada 100 kilómetros en ciclo WLTP, una aceleración de 0 a 100 en 6,1 segundos y una velocidad punta de 235 km/h (135 km/h en modo eléctrico). 

Opel Grandland GSe 2022

Puesta a punto deportiva

La marca alemana ha trabajado en el chasis del todocamino para hacerlo más ágil y reactivo. Así, el coche obtiene muelles y amortiguadores KONI más firmes y con la tecnología FSD (Frequency Selective Damping), que permite variar la puesta a punto de los mismos en función de la conducción. 

Asimismo, la dirección está especialmente calibrada y cabe recordar que el SUV germano emplea un tren trasero multibrazo, más avanzado y preciso que un eje torsional. Al respecto, Opel promete "una respuesta inmediata y directa a cualquier orden del conductor, al tiempo que se mantiene la estabilidad típica de Opel en frenadas, curvas y a altas velocidades".

El Opel Grandland GSe 2022 saldrá de la fábrica alemana de Eisenach y, de momento, no hay fecha de comercialización ni, por supuesto, precios. Posiblemente, estará en el entorno de los 50.000 y 55.000 euros.