Toda aventura tiene un inicio. Y si la del medio siglo de historia del Volkswagen Golf arrancó en la primavera de 1974, en la factoría de Wolfsburgo, la nuestra comienza en una calurosa mañana de julio en Madrid. Y lo hace al compás de una que llave gira y pone en marcha el motor 1.8 de un Volkswagen Golf GTI Mk2 de finales del año 1991.

La verdad es que hace muchos años que conozco a Pablo. Tantos, que casi ni me acuerdo de cuántos. Pero la verdad, nunca me había metido con él en un lío tan emocionante y desafiante como este: ir conduciendo un coche ya clásico como el GTI, de Madrid a Wolfsburgo.

¿Objetivo? Llegar en cuatro etapas al GTI Fanfest, la gran fiesta de los aficionados al modelo, celebrada en los aledaños del Volkswagen Arena de la ciudad alemana. Así que, en cierto modo, vamos a una fiesta de cumpleaños. A 2.700 km de distancia, sí, pero a una fiesta, al fin y al cabo. Un trayecto en el que hay tiempo de sobra para repasar la historia del modelo.

El coche protagonista... y el de apoyo

Sin duda, el protagonista absoluto del viaje es el GTI Mk2, en el que Pablo y yo nos turnamos al volante. Un ejemplar con 112 CV, carrocería de cinco puertas y color negro, dotado del acabado Collection. De ahí que, por ejemplo, luzca una tapicería distinta al original tartán con acentos rojos o intermitentes laterales en las aletas, en lugar del emblema del castillo de Wolfsburgo.

Un Volkswagen estrictamente de serie, con elevalunas eléctricos delanteros y traseros, pero sin dirección asistida ni aire acondicionado. Un elemento, este último, que echaremos de menos durante el viaje, en plena ola de calor...

Madrid-Wolfsburgo en un VW Golf GTI Mk2 de 1991

Totalmente de serie y con algo más de 91.000 km: así es el GTI de la prueba

A nuestro lado, como coche de producción y apoyo constante, contamos con un Volkswagen Touareg eHybrid, o lo que es lo mismo, la versión híbrida enchufable con motor V6 del SUV de lujo, que entrega 381 CV de potencia combinada.

En él viajarán, junto a todo su equipo de foto y vídeo, Iván y Óscar, los 'culpables' de que todo el mundo pueda disfrutar de esta gran aventura que dividimos en cuatro etapas, a lo largo de cuatro países: España, Francia, Luxemburgo y Alemania.

<p>Logo incrustado en la parrilla, frente a logo iluminado: la evolución de los tiempos</p>

Logo incrustado en la parrilla, frente a logo iluminado: la evolución de los tiempos

Etapa 1: Madrid-Barcelona

Saliendo pronto, el primer día nuestro objetivo está claro: avanzar todo lo que podamos, creando a su vez todo el contenido posible: tanto de foto y vídeo, como de redes sociales (los que nos seguís, lo habréis comprobado). De ahí que nos planteemos llegar hasta Barcelona.

Pero claro, nuestro plan consiste viajar un poco como se hacía en los años 90. Así que nos equipamos con cintas de casete, mapas de carreteras... y nos hacemos a la idea de que tendremos que parar con cierta asiduidad a hidratarnos. También, que escaparemos en cuanto podamos de la autopista.

Con lo primero, cumplimos rápido. Al poco de superar los 100 km, paramos a desayunar. Y sí, si vamos a recorrer 2.700 km sin aire acondicionado, lo de apretarnos unos torreznos de buena mañana, en el Área 103, es un juego de niños. Y así continuamos hasta Alhama de Aragón (Zaragoza), donde nos desviamos en busca de la antigua carretera nacional.

Madrid-Wolfsburgo en un VW Golf GTI Mk2 de 1991

Por la autopista avanzamos rápido, pero el cuerpo nos pide pronto buscar la N-II

<p>Los torreznos del Área 103, combustible para los conductores</p>

Torreznos del Área 103, gasolina para los conductores

<p>¿Alguien dijo GPS? Nada mejor que un mapa en papel</p>

¿Alguien dijo GPS? Nada mejor que un mapa en papel

Madrid-Wolfsburgo en un VW Golf GTI Mk2 de 1991

Restaurantes y bares de carretera: lugares con alma, cuando se viajaba por nacionales

Y así, vamos avanzando: Bubierca, Ateca, Terrer, Calatayud... ¡Cómo se disfruta de la carretera desierta, en un coche como el GTI! Sin duda, para él, es como volver a casa, a su hábitat natural, mientras va estirando las piernas. Y Pablo, que va al volante en este tramo, lo disfruta kilómetro a kilómetro.

Tras un breve paso por la autopista para llegar Zaragoza, no tardamos en volver a otra carretera secundaria para llegar a nuestro siguiente destino: la comarca de Los Monegros; probablemente, uno de los lugares menos recomendables para circular en un día de calor y sin aire acondicionado. Pero así somos.

Los paisajes únicos que nos regala esta zona nos animan a seguir avanzando, tras una rápida parada a comer en Sariñena. Desde ahí, continuaremos atravesando el Bajo Cinca hasta llegar a Fraga. Y ahí ya sí, volveremos a la A-2 para continuar hasta Barcelona. Allí, nos espera la cama, la cena... y la ducha. Y la verdad, no sé que cuál de las tres agradecemos más.

Madrid-Wolfsburgo en un VW Golf GTI Mk2 de 1991

¿Problemas en el viaje? Nada como un taller de carretera en Monegros

<p>A 40 grados y sin aire: la hidratación es básica</p>

A 40 grados y sin aire: la hidratación es básica

Madrid-Wolfsburgo en un VW Golf GTI Mk2 de 1991

Con algo de buena música, el viaje se hace más corto

<p>Los Monegros y la Comarca del Bajo Cinca nos dejan imágenes increíbles</p>

Los Monegros y la Comarca del Bajo Cinca nos dejan imágenes increíbles

Etapa 2: Barcelona-Dijon

Sin duda, todos sabíamos que la segunda etapa, de unos 900 km y con mucha autopista (y peajes), iba a ser la más dura del viaje. Y lo acaba siendo, también por el calor y los constantes atascos. Pero empecemos por el principio.

El día arranca en Barcelona, en las oficinas de Volkswagen Group España Distribución, con un invitado muy especial: Enrique Pifarré, Director General de Volkswagen España. Como puedes ver en el vídeo, hablamos con él largo y tendido, siempre con el Golf como eje central de la conversación.

Enrique Pifarré, Director General de Volkswagen España, nos abrió las puertas de sus oficinas
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Gracias por tu ayuda en Barcelona, Paula

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Director de la marca, pero también, GTI-lover

Con sus ánimos presentes, antes de dejar atrás del todo Barcelona, pasamos por el concesionario Carhaus para encontrarnos con una de las sorpresas del viaje: dejamos el Touareg y recogemos una Volkswagen Grand California: sí, esa casa sobre ruedas en la que podremos cocinar, comer, dormir, ducharnos... y, sobre todo, viajar fantásticamente.

Con nuestro nuevo 'juguete', seguimos avanzando: Perpiñán, Narbona, Montpellier, Aviñón... tramo durísimo, hasta que llegamos a Valence. A partir de ahí, con menos tráfico y menos temperatura, con el sol cayendo, la cosa empieza a mejorar. 

Y ya no podemos resistirnos más, nos salimos de la autopista, a la aventura, hasta que encontramos unas carreteras magníficas, donde disfrutamos al máximo de la conducción.

Un rato absolutamente genial, que apuramos todo lo que podemos, antes de volver a la autopista. Porque sí, ya es casi de noche, nos quedan casi 250 km hasta Dijon, no tenemos camping en el que dormir y, al día siguiente, nos esperan emociones fuertes... 

Madrid-Wolfsburgo en un VW Golf GTI Mk2 de 1991

Volkswagen Golf GTI Mk2 y Grand California: la extraña pareja

<p>Qué tendrá la última hora del día...</p>

Qué tendrá la última hora del día...

<p>... que a los fotógrafos les encanta</p>

... que a los fotógrafos les encanta

<p>Dos conductores felices, con dos modelos que les encantan</p>

Dos conductores felices, con dos modelos que les encantan

Etapa 3: Dijon-Nürburg

Probablemente, la etapa más emocionante. Porque si hasta ahora, habíamos buscado los 'tramos GTI' en carreteras alejadas de la autopista, en esta tercera etapa el objetivo era llegar a Nürburg, para disfrutar de ese Disneylandia para adultos, en el que la atracción principal es un circuito de carreras: Nürburgring.

Llámalo como quieras: Norschleife, el 'Ring', Green Hell, el Infierno de las montañas de Eifel... Da igual: di Nürburgring y todo el mundo pensará en ese circuito único en el mundo, en sus más de 20 km de largo, en la vuelta de Stefan Bellof, en el accidente de Niki Lauda, en monoplazas setenteros de F1 despegando... 

Sí, ese trazado donde, como decía Jackie Stewart, "si te gusta… o no has ido suficientemente rápido, o estás loco". Y ahí me veo, al volante del GTI, tras pagar los 30 euros que cuesta una vuelta, con la tarjeta frente a la barrera que da acceso al cielo sobre la tierra para los 'petrolhead' de todo el mundo. 

Madrid-Wolfsburgo, un viaje de 2.700 km en un VW Golf GTI Mk2 de 1991

Casa sobre ruedas, en la que hacer vida, y clásico aparcado al lado: plan sin fisuras

<p>En el desayuno, las tazas lo adelantaban...</p>

En el desayuno, las tazas lo adelantaban...

<p>...

... "Nürburgring o barbarie"

Madrid-Wolfsburgo, un viaje de 2.700 km en un VW Golf GTI Mk2 de 1991

Y sí, el GTI llegó al Infierno Verde

Pero contrariamente a lo que se pudiera pensar, vivo la vuelta con mucha emoción, pero también, sufriendo mucho. Mi coche es una chicane sobre ruedas, frente a los hiperdeportivos de más de 500 CV que me pasan como si fuera parado. Y sí, miro más por el retrovisor que hacia el frente.

Y la verdad, cuando acabo la vuelta, siento alivio. Alivio por salir sano y salvo, pero también, porque el coche siga entero. Porque no nos despistemos, el objetivo es llegar a Wolfsburgo. Así que, desde luego, creo que en el futuro disfrutaré más de recordarlo que de haberlo hecho.

Con la emoción todavía a flor de piel, queda mucho por hacer: cenar con el equipo de Vulcan Alpha, con nuestros amigos Marta y Pablo, pero también con uno de los tipos más rápidos y más mediáticos de la zona, Misha Charoudin, que acumula 1,1 millones de seguidores en Instagram.

¿La mejor forma de cerrar el día? Pasarnos por el increíble taller de Vulcan Alpha y echarnos una carrera en su simulador, visitar el luminoso del circuito y volver a pisar el asfalto... esta vez, a pie.

Madrid-Wolfsburgo, un viaje de 2.700 km en un VW Golf GTI Mk2 de 1991

Casi 33 años y fundiendo en Nürburgring: ¿quién dijo viejo?

<p>El increíble taller de Vulcan Alpha</p>

El increíble taller de Vulcan Alpha

<p>Experiencia top: paseo nocturno por el Nordschleife</p>

Experiencia top: paseo nocturno por el Nordschleife

<p>Luminoso del circuito por la noche: un imprescindible</p>

Luminoso del circuito por la noche: un imprescindible

Etapa 4: Nürburg-Wolfsburgo

El último día de viaje consistía en 'llevar el coche a casa'. Y nunca mejor dicho, ya que, técnicamente, Wolfsburgo es la casa de Volkswagen. Y el GTI Fanfest nos esperaba con un lema a la altura: "Icons coming home". Una ruta que se disfruta bastante, por la lluvia, el asfalto mojado y las carreteras que rodean al circuito: absolutamente espectaculares.

Ahora bien, antes de alejarnos del circuito, paramos en otro de los pequeños paraísos que puedes encontrar en Nürburgring: la gasolinera con más maquetas del mundo, así como todo tipo de accesorios y recuerdos para los más 'petrolhead'.

Madrid-Wolfsburgo, un viaje de 2.700 km en un VW Golf GTI Mk2 de 1991

Paremos donde paremos, siempre se acerca alguien a ver el coche

Madrid-Wolfsburgo, un viaje de 2.700 km en un VW Golf GTI Mk2 de 1991

Si ha habido vuelta...

<p>... hay pegatina</p>

... hay pegatina

Madrid-Wolfsburgo, un viaje de 2.700 km en un VW Golf GTI Mk2 de 1991

Objetivo cumplido: llegamos a Wolfsburgo

Y de ahí, directos a Wolfsburgo, final de nuestro viaje. Donde tras una ducha y dejar aparcado el GTI en un sitio en el que todo el mundo lo viera, nos 'integramos' en el plan del GTI Fanfest 2024.

Y tras el recibimiento por parte de Joaquín Torres, jefe de Prensa de Volkswagen España, y de Thomas Schäfer, CEO de la marca Volkswagen, empezamos a disfrutar del festival, con un invitado tan especial como Andreas Mindt: el director de Diseño de Volkswagen, que alucinó con nuestro viaje y con el estado del GTI, y con el que pudimos hablar largo y tendido sobre el pasado, el presente y el futuro del Golf (tienes la entrevista en el vídeo).

Pero también, pasamos un buen rato en torno al Autostadt, unas instalaciones top para los amantes del mundo del motor. Pero... ¿qué te parece si te contamos sobre todo ello, al detalle, en un próximo post? 

Continuará...

Thomas Schäfer, CEO de la marca, y Joaquín Torres, jefe de Prensa de VW, nos recibieron en el GTI Fanfest

Galería: Madrid-Wolfsburgo, un viaje de 2.700 km en un VW Golf GTI Mk2 de 1991