Audi Quattro
El Audi Quattro, uno de los modelos más importantes en la historia de la firma de los cuatro aros, es un vehículo mítico gracias a sus éxitos en el mundo de los rallies, pero también por su famoso sistema de tracción integral y su potente mecánica turboalimentada de cinco cilindros y 2,1 litros.
Las primeras unidades desarrollaban una potencia de 200 CV y 284 Nm. Posteriormente, a partir de 1987, equipó una mecánica con turbocompresor de 2,2 litros y 220 CV. En todos los casos, la caja de cambios era manual de cinco velocidades.
Audi RS2 Avant
Hablamos de otro vehículo mítico en la historia de la marca alemana. Se trata del RS2 Avant, presentado en el salón de Frankfurt de 1993, que también empleaba un motor pentacilíndrico.
El bloque turboalimentado estaba dispuesto longitudinalmente y desarrollaba una potencia máxima de 315 CV, con el que este familiar era capaz de acelerar, de 0 a 100 km/h, en solo 4,8 segundos. La caja de cambios era manual de seis velocidades.
Volvo 850 R
El Volvo 850, fabricado entre 1990 y 1997, ofrecía motores de cinco cilindros con 2,0 o 2,5 litros de cilindrada. Pero, sin duda alguna, el bloque pentacilíndrico y turboalimentado más famoso de Volvo era el denominado 'B52324T4', con 2,3 litros de cilindrada, destinado a 'animar' al 850 R.
Desarrollaba una potencia de 250 CV, con un par motor de 352 Nm. Con la caja de cambios manual 'M59', el diferencial autoblocante mecánico de tipo Torsen, el intercooler de mayor tamaño y la centralita electrónica Motronic 4.4, el modelo sueco se convirtió en una leyenda, tanto con la carrocería sedán como con la familiar Station Wagon.
Volvo V70 R
El portentoso motor turbo del 850 R también pudimos verlo en otro familiar deportivo posterior, como fue el V70 R.
Ford Focus RS MkII
El motor de 2,5 litros y cinco cilindros en línea, turboalimentado, de origen Volvo, fue el elegido por Ford para montarlo en los Focus ST y RS. Si nos centramos en la segunda versión, desarrollaba una potencia de 305 CV y 440 Nm de par motor. El Focus RS de segunda generación mejoraba, en muchas facetas, a su predecesor, además de lucir un diseño mucho más llamativo que el de la anterior generación.
Por encima del RS 'normal', la firma del óvalo comercializó una edición limitada a 500 unidades, denominada Focus RS500. Desarrollaba 350 CV de potencia y fue el modelo más codiciado de esa generación.
Posteriormente, el Focus RS MkIII optó por un propulsor EcoBoost, con 2,3 litros de cilindrada, pero con cuatro cilindros y 350 CV de potencia.
Volkswagen Bora
Volkswagen también apostó, con fuerza, por las mecánicas de cinco cilindros y las trasladó a varios modelos de su listado de producto. Denominado comercialmente como VR5, la firma alemana lo ofreció asociado al Bora, que sonaba como un motor mucho más poderoso.
El bloque tenía una cilindrada de 2,3 litros, disposición en V y desarrollaba una potencia de 150 CV, en las versiones de 10 válvulas, o 170 CV, los de 20 válvulas.
SEAT Toledo VR5
En el caso del fabricante español, el SEAT Toledo equipó la mecánica 2.3 VR5 20 válvulas, con 170 CV, como marca perteneciente al Grupo Volkswagen.
Mercedes-Benz W123
Es una de las pocas mecánicas, de ciclo diésel, que aparecen en esta lista y está firmada por Mercedes-Benz. La berlina con código interno W123 fue el primer modelo de la estrella en equipar un propulsor de cinco cilindros, en 1974.
El motor turbodiésel, con código OM617.912, tenía una cilindrada de 3,0 litros, pero fue ofreciendo un aumento de potencia a medida que evolucionaba: el modelo 300D anunciaba 80 CV de potencia, posteriormente 88 CV en el caso del 300CD y, finalmente, 125 CV, correspondientes al 300TD.
FIAT Bravo HGT
No todo el mundo conoce los motores de cinco cilindros del Grupo FCA (Fiat en la época). Sin embargo, entre 1995 y 2001, la versión deportiva del compacto italiano, el Bravo HGT, utilizaba un propulsor de gasolina, atmosférico, con 2,0 litros de cilindrada, 20 válvulas y 155 CV de potencia.
Posteriormente, la firma italiana desarrolló una versión turboalimentada del Bravo HGT que alcanzaba los 220 CV.
FIAT Stilo
A partir del año 2001, el Fiat Stilo fue el modelo compacto estrella de la marca. Como no podía ser de otra manera, también dispuso de una versión deportiva, en este caso, equipada con un bloque pentacilíndrico, atmosférico, con 2,4 litros y 20 válvulas, que desarrollaba 170 CV de potencia. Estuvo a la venta hasta el año 2007.
Alfa Romeo 159
Otro de los representantes de ciclo diésel llega de la mano de Alfa Romeo. Los predecesores del Giulia, los 156 y 159, se vendieron entre los años 1996 y 2010 con el motor turbodiésel 2.4 Multijet, de origen Fiat.
Las primeras unidades desarrollaban 136 CV (156 2.4 JTD), mientras que, a partir del año 2007, los 159 alcanzaron los 210 CV y 400 Nm de par motor.
Land Rover Defender Td5
El Land Rover Defender ha sido uno de los todoterrenos más robustos de todos los tiempos y parece que la próxima generación se encuentra a la vuelta de la esquina.
En el modelo clásico, la gama estaba dividida en variantes denominadas 90, 110 y 130, en función de la distancia entre ejes, en pulgadas. Sin duda, los amantes de este 4x4 puro también pudieron disfrutar de una mecánica de cinco cilindros.
Concretamente, hablamos del motor de ciclo diésel Td5, con 2,5 litros de cilindrada, desarrollado por Land Rover. Firmaba varios niveles de potencia, entre 122 y 220 CV, pero en el año 2007 fue sustituido por un bloque DuraTorq, de origen Ford.