BMW 3.0 CSL 'Batmobile' (1973) - 310.580 euros
Nuestro repaso a los BMW más prestigiosos arranca con un icono absoluto del fabricante bávaro, el BMW 3.0 CSL 'Batmobile', que fue el primero en exhibir enormes alerones, al menos entre los coches de calle europeos. Este ejemplar de 1973 se vendió en 2016 por un precio récord de 310.580 euros
Además de tener menos de 40.000 kilómetros en el momento de la subasta, este coupé con un kit aerodinámico especial es uno de los 167 ejemplares fabricados entre 1973 y 1976, con un motor de seis cilindros en línea, 3,2 litros y 206 CV de potencia. La versión de carreras ganó el Campeonato Europeo de Turismos en seis ocasiones.
BMW 502 Cabriolet Baur (1956) - 315.000 euros
En el noveno lugar de esta lista, encontramos un muy exclusivo BMW 502 Cabriolet con carrocería Baur, que es uno de los 57 ejemplares fabricados. En 2015, una unidad de 1956, perfectamente restaurada, cambió de manos por poco más de 315.000 euros.
Hablamos del primer coche alemán de posguerra equipado con un motor V8 de gasolina, en concreto un 3.2 de 120 CV, que permitía a este auténtico salón sobre ruedas alcanzar una velocidad máxima de hasta 170 km/h.
BMW Z8 (2003) - 407.000 euros
Resulta algo sorprendente que en este octavo puesto del ranking haya un BMW Z8 de 2003, un superdeportivo relativamente moderno que, sin embargo, fue subastado en el año 2017 por el equivalente a unos 407.000 euros. El precio lo determinó en parte el buen estado de este coche residente en América, que apenas tenía unas decenas de kilómetros en el marcador.
El genial descapotable alemán, del que se fabricaron 5.703 unidades (incluidos 555 Alpina Roadster), equipa un enorme motor 4,9 litros V8 atmosférico de alrededor de 400 CV, capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos y alcanzar una velocidad punta de 250 km/h.
BMW 328 Cabriolet (1938) - 500.640 euros
El BMW 328 es un gran clásico de la firma alemana. Un deportivo de preguerra con un envidiable palmarés, en cuya familia destaca este 328 Cabriolet de 1938, una versión puramente de carretera, con una elegante y redondeada carrocería, que se vendió en 2018 por un precio récord de 500.640 euros, nada menos.
Se trata de uno de los pocos 328 Cabriolet carrozados por la firma alemana Autenrieth, y uno de los 464 BMW 328 que se produjeron en total. Lógicamente, equipaba el motor 2.0 de seis cilindros en línea y 80 CV. La preciosa versión bicolor vendida en París hace un par de años contaba con únicamente 27.690 kilómetros, a pesar de sus 80 años de historia.
BMW 503 Cabriolet (1957) - 530.868 euros
Tras la Segunda Guerra Mundial, el GT más deportivo y lujoso de la marca de Múnich fue el BMW 503, que aprovechó el motor V8 del 502 que le precedió, para ofrecer coupés y descapotables con un genial rendimiento y un diseño único. Un 503 Cabriolet de 1957 logró alcanzar un récord en 2017, vendiéndose en subasta por un precio de 530.868 euros.
El de la imagen es uno de los 129 Cabriolet producidos por la firma, diseñado por Albrecht von Goertz y destinado en su momento a un pequeño círculo de ricos entusiastas. No obstante, el motor V8 de 3,2 litros y 140 CV permite a este coche de los años 50 rozar los 190 km/h.
BMW M1 (1981) - 550.901 euros
El BMW M1 sigue siendo uno de los proyectos más interesantes y 'fugaces' de la compañía de Baviera. Para su primer superdeportivo de motor central, BMW confió el diseño a Giugiaro y el chasis tubular a Giampaolo Dallara, y el motor era un seis cilindros en línea de 3,5 litros y 277 CV.
De este rival para los automóviles deportivos italianos de finales de los años 70 se produjeron únicamente 453 unidades, 54 de ellas de competición. Hasta ahora, el precio más alto lo consiguió un ejemplar de 1981 con apenas 11.000 kilómetros, que se vendió en el año 2015 por 550.901 euros. Cabe recordar que el modelo acelera de 0 a 100 km/h en 5,6 segundos y anuncia una velocidad punta de 262 km/h.
BMW 320i Turbo IMSA (1978) - 677.000 euros
Con este BMW 320i Turbo IMSA, repasamos directamente la historia del automovilismo, con un coche que corrió y ganó en América. Protagonista de la serie IMSA GT, la primera generación del Serie 3 tenía un motor turbo y una carrocería especial, y un ejemplar del equipo McLaren Engines se vendió en 2019 por 677.000 euros.
Con los colores de guerra de BMW Motorsport, es uno de los 3 IMSA Turbo fabricados; en concreto, el chasis número 03, que también estaba aligerado en 136 kilos. El motor es un 2.0 M12 de cuatro cilindros, con 650 CV y que, además, sirvió como laboratorio para el futuro 1.5 Turbo M12/13, que se utilizó en el Brabham BT52 de Nelson Piquet, con el que el piloto se convirtió en Campeón del Mundo de Fórmula 1 en 1983.
BMW i8 Edición Concours d'Elegance (2014) - 764.000 euros
Para su lanzamiento en el mercado americano, el BMW i8 hizo su debut en Pebble Beach, en agosto del año 2014, con una serie especial subastada para la ocasión. Hablamos del BMW i8 Concours d'Elegance Edition, que costó 764.000 euros, es decir, seis veces más que el precio de venta del modelo. El dinero iba a ser donado a asociaciones juveniles de Monterey.
Pero ¿qué tenía de especial este híbrido enchufable de 362 CV y 250 km/h de velocidad máxima? Para empezar, era un coupé único en su especie, y además estaba fabricado de una manera especial, con la pintura mate exclusiva 'Frozen Grey Metallic', una tapicería de cuero marrón Dalbergia, placas conmemorativas y otros detalles únicos, por dentro y por fuera.
BMW 328 Roadster (1937) - 901.475 euros
En el segundo escalón del podio encontramos otro BMW 328, pero en este caso un Roadster, icono de la deportividad alemana de los años 30. Este coche de carreras, biplaza y descapotable, es un verdadero mito para todo coleccionista que quiera ser admitido en los más importantes eventos y competiciones, incluida la Mille Miglia.
El ejemplo perfecto es el BMW 328 Roadster de 1937 (con número de chasis 85095), que se subastó en 2014 por 901.475 euros, un récord que todavía sigue vigente para este modelo. El motor es el clásico 2,0 litros de seis cilindros en línea y 80 CV.
BMW 507 (1957) - 4.194.422 euros
Desde hace años, el rey absoluto de la familia BMW ha sido el 507, que se ha convertido en algo único entre el resto de obras maestras de la firma bávara. Basta decir que, incluso teniendo 2 millones de euros, es complicado encontrar uno, al menos en perfectas condiciones. El más caro sigue siendo un ejemplar de 1957 que perteneció al piloto John Surtees durante 70 años, y que se vendió en 2018 por 4.194.422 euros.
Lo más curioso es que, en aquella época, este BMW 507 fue regalado por el Conde Domenico Agusta al propio piloto, que por entonces competía en el mundo de las dos ruedas. El modelo, dibujado por Albrecht von Goertz, encandiló a famosos y ricos de todo el mundo. Escondía un motor V8 de 3,2 litros y 150 CV, con el que podía alcanzar los 220 km/h. La producción estuvo limitada a 252 unidades.