CUPRA
La última en completar el proceso y la gran 'culpable' de que hayamos elaborado esta lista. El pasado 22 de febrero de 2018, en un escenario único como el Autódromo de Terramar, asistimos al nacimiento de CUPRA como marca independiente... aunque dentro de la estructura de SEAT.
El primer modelo de su andadura en solitario fue el CUPRA Ateca, un SUV deportivo, con 300 CV de potencia. Por supuesto, llegarán más lanzamientos, como han dejado ver los prototipo CUPRA Ibiza y CUPRA Formentor. Incluso, no deberíamos descartar un CUPRA Arona.
Además, CUPRA ha asumido la responsabilidad de toda la división de competición y carreras, tarea que, hasta ahora, recaía sobre SEAT Sport. Su primer modelo fue el CUPRA TCR.
Según afirmó Luca de Meo, presidente de SEAT, "CUPRA es una gran oportunidad para SEAT, para nuestros clientes y para el negocio".
DS Automobiles
El caso de DS Automobiles ha sido, cuando menos, curioso. No obstante, lo que nació en 2009 como la división más lujosa de Citroën, con los DS 3, DS 4 y DS 5, se transformó en una marca totalmente independiente, en 2014.
Eso sí, hasta 2017 no llegó el DS 7 Crossback, el primer modelo 100% diferenciado de su anterior etapa con Citroën.
Abarth
Al hablar de la firma del escorpión, lo hacemos de una figura ya legendaria de la historia de la automoción, que ha vivido diferentes etapas.
La última, desde 2007, es como marca independiente dentro del Grupo FCA, gracias al impulso de una figura, que también ha sido clave en el actual lanzamiento de CUPRA: Luca de Meo. Tras su primer modelo, el Abarth Grande Punto, llegó el que más popularidad y ventas le dio: el Abarth 500.
Actualmente, en sus concesionarios, se pueden encontrar diferentes versiones del Abarth 595, así como el descapotable Abarth 124 Spider.
Polestar
Tras una larga y fructífera relación con Volvo Cars, a la hora de preparar vehículos de altas prestaciones y de competición, desde junio de 2017, Polestar inició su aventura como marca propia y diferenciada. ¿Su objetivo? Desarrollar vehículos electrificados.
El primer modelo fue el Polestar 1, un coupé, dotado de un sistema de propulsión híbrido enchufable, que entrega 600 CV de potencia.
Además, la firma tiene tres nuevos proyectos en marcha: Polestar 2 (una berlina, ya presentada), Polestar 3 (SUV) y Polestar 4 (descapotable).
Mercedes-AMG
En el caso de AMG, su relación con Mercedes-Benz ha pasado por casi todos los estados. Nació en 1967, como un preparador independiente. Más tarde, en 1999, la mayor parte del accionariado pasó a manos de Daimler, para, en 2005, acabar siendo absorbida por el gigante alemán.
Sin embargo, la independencia como marca no llegó hasta finales de 2014, coincidiendo con la presentación del Mercedes-AMG GT.
Desde entonces, cuenta con su propio espacio en las concesiones y ha monopolizado la creación de los deportivos de la firma de la estrella. Un estatus parecido al que tiene Mercedes-Maybach, con las versiones más lujosas del Clase S.
Genesis Motors
Nacida como la división de lujo de Hyundai, Genesis se estableció como una marca 100% independiente el 4 de noviembre de 2015.
Por el momento, dispone de tres modelos (G90, G80 y G70) y se centra en mercados como Corea del Sur, Estados Unidos, Canadá, China y Oriente Medio. Más adelante, desembarcará en Europa y el resto de Asia.
Alpine
Nacida a finales de los 50, Alpine siempre ha tenido la consideración de fabricante propio. Sin embargo, tras su compra por parte de Renault, en el año 1973, la frontera entre el concepto de marca y el de preparador de la marca del rombo llegó a difuminarse un poco. Tanto, que su factoría en Dieppe pasó a ser la sede de Renault Sport. Así, tras el lanzamiento del Renault Alpine GTA (o A610), Alpine desapareció en 1995.
Sin embargo, el relanzamiento de la marca en 2017 no solo supuso su retorno a lo grande, con el nuevo A110; también, su reafirmación como marca con carácter propio.