La década de 1960 fue dura en Reino Unido. La crisis económica propició que la población comenzará a conducir coches cada vez más pequeños y ahorradores, con los que combatir el elevado precio del combustible.

En aquella época no existían los SUV y el mundo era un lugar amigable en el que los niños podían jugar tranquilamente en las calles, aunque por desgracia muchos lo hacían sin zapatos. 

Por aquel entonces, el conglomerado British Leyland, al que pertenecían Jaguar y Land Rover, era el gran referente de la industria automovilística británica. Hasta que la crisis hizo que comenzaran a acumularse stocks, lo que a su vez detuvo el desarrollo de nuevos modelos...

En este entorno nació el prototipo del Range Rover Velar de 1969 de esta prueba. Un modelo que debía combinar la comodidad de un Jaguar S-Type, con las capacidades 4x4 de un Land Rover Defender.

Prueba Range Rover Velar 1969 (prototipo)
Prueba Range Rover Velar 1969 (prototipo)

¿Como nació el Range Rover Velar?

El prototipo fue apodado por uno de los ingenieros de la compañía como Velar y no por casualidad, sino porque se desarrolló en secreto y el término latín Velare, que significa cubrir o esconder, se ajustaba perfectamente a la filosofía del proyecto.

Y es que, este Range Rover Velar no era un automóvil convencional ya que, por primera vez, se había atrevido a romper las barreras de los segmentos tradicionales... ¿o acaso conoces algún otro todoterreno de la época que, además, pretendiera ser un coche de lujo?

Aunque, en principio, Land Rover imaginaba que su mercado se limitaría a agricultores, debido a que su posición de conducción elevada ayudaba al circular por estos terrenos, lo cierto es que el Range Rover que surgió a raíz del Velar fue todo un éxito... como demuestra el hecho de que estuviera a la venta durante más de 25 años. 

A simple vista, diría que este modelo corresponde a una unidad de la primera generación del Range Rover. Con su diseño cuadrado, las ópticas circulares y la carrocería de tres puertas. Sin embargo, estoy al volante de uno de los ocho prototipos del Velar que se construyeron, en 1969... y que cruzaron el Sáhara dos veces para comprobar la resistencia de sus componentes mecánicos.  

Prueba Range Rover Velar 1969 (prototipo)

Range Rover Velar, ¿cómo va en marcha?

En la actualidad, prácticamente todos los coches del mercado son sencillos de conducir y resulta realmente difícil encontrar un automóvil horrible. Sin embargo, cuando te vas a poner al volante de un clásico de los años 60 lo mejor que puedes hacer es reprogramar tu cerebro y prepararte para lo que vas a encontrar.

Este modelo no era mal coche comparado con los todoterreno de su época, pero con los estándares de hoy día, el incesante balanceo de la carrocería, la pesadez de la dirección y todos los mandos encargados de controlar el coche, le dan un toque terrorífico... que, por otra parte, debían tener todos los automóviles de hace 50 años. 

Todo muy lejos de cómo la suspensión del Range Rover actual combina un comportamiento propio de un turismo al circular por carretera, con una gran eficacia en el campo. 

Prueba Range Rover Velar 1969 (prototipo)

Arrancar el Range Rover Velar te hace sentir un poco engreído, pero intentar insertar la primera velocidad es una cura de humildad. Con el tiempo, descubres que tirando de la palanca hacia la izquierda, en algún lugar es posible encontrarla. La segunda velocidad está justo debajo, tirando en línea recta de la palanca, mientras que para insertar la tercera marcha debes tirar de la palanca como si quisieras situarla debajo de la barbilla... Porque si no te has dado cuenta, este Velar tiene el volante a la derecha.

El embrague, por su parte, tiene un punto de fricción difícil de encontrar y tú, como conductor, tratas de compensarlo con toda la concentración y habilidad de la que dispones. 

Range Rover Velar 2017, más información:

El volante es muy fino, comparado con el de los modelos actuales. Además, tendrás que agarrarlo con fuerza, porque girar en las curvas resulta pesado comparado con los coches del siglo XXI, en los que la electrónica posibilita girar el volante, prácticamente, con un dedo.

Se trata de un todoterreno algo estresante, pero no quiere decir que no sea divertido. En realidad, es un automóvil que te hace sentir en contacto con el mundo exterior mientras lo conduces y, además, esa sensación de que te vas a caer por la ventanilla en cada curva, simplemente, es imposible de conseguir en cualquier otro modelo a la venta en la actualidad. Es de esos en automóviles en los que tú llevas el coche, y no es el coche el que te lleva a ti

¿Debería comprar un Range Rover Velar?

Este modelo es una reliquia familiar con un valor difícil de calcular y, salvo que estés dispuesto a invertir en el costoso mantenimiento de un coche clásico, te recomendamos que no lo hagas.  

Dentro de muy poco llegará a los concesionarios el Range Rover Velar 2017, un modelo mucho más cómodo y recomendable... y que te ofrece todas las comodidades del siglo XXI.

 

Land Rover Range Rover Velar

Precio base 2.229 euros (1969)
Motor Gasolina, ocho cilindros en V, 3,5 litros
Potencia 130 CV
Número de asientos 5
Caja de cambios Manual, 4 velocidades
Tracción Tracción total