Las décadas de los años 60 y 70 están consideradas la época dorada de los muscle cars, una receta americana que ha tenido mucho éxito durante muchísimos años, pero que va a tener que reinventarse de cara al futuro, una vez la era eléctrica llegue para quedarse.

De hecho son muchos los países que han anunciado ya restricciones a la venta de modelos con motor de combustión para dentro de una o dos décadas, según el caso, e incluso el estado de California tiene intención de prohibir este tipo de vehículos para 2035.

Dodge es uno de los pocos fabricantes que mantiene todavía viva la fórmula clásica del muscle car, aunque es cierto que su popularidad es cada vez menor, debido al creciente precio del combustible y también a la tendencia actual hacia las energías alternativas.

En este sentido, el fabricante estadounidense tendrá que hacer importantes cambios en sus modelos si quiere que sigan siendo competitivos, y la buena noticia es que Dodge tiene intención de reinventarse.

"Todo el mundo sabe que la electrificación está en camino, y nosotros reinventaremos el muscle car, al menos en lo que respecta a Dodge", ha declarado Matt McAlear, responsable de Ventas de la marca americana.

"Estoy extremadamente emocionado sobre hacia dónde nos lleva el futuro, pero ahora mismo todo el mundo está disfrutando la fiesta de despedida", afirma McAlear.

Dodge Challenger SRT Super Stock 2020

De momento no sabemos qué caminos podría tomar Dodge con respecto a sus Challenger y Charger, ya que parecen absolutamente inseparables de sus enormes motores HEMI V8, así que no descartamos que apuesten primero por modelos híbridos.

En cualquier caso, lo que está claro es que Dodge ha de dar un paso importante hacia la electrificación si quiere seguir existiendo en un mercado cada vez más interesado por los coches eléctricos y por las nuevas tecnologías. Según McAlear, "los sustitutos serán mucho más excitantes".