¿Te acuerdas del Volkswagen CC? Sí, también conocido como Passat CC, fue un modelo que Volkswagen comercializó, entre 2008 y este mismo año, con unos resultados de ventas más bien discretos. Pues bien, lejos de desanimarse, la firma alemana ha seguido apostando por esta categoría tan especial, que se sitúa entre las berlinas y los grandes cupés, con el Volkswagen Arteon 2018.
Y, sinceramente, no me parece una mala idea. En un mercado donde las berlinas tradicionales están perdiendo comba frente a los cada vez más populares SUV, ponerse al volante de un modelo como el Arteon, que se sale de lo común, puede ser un reclamo lo suficientemente interesante para muchos conductores.
Volkswagen Arteon 2018: amplio y elegante
Indudablemente, nos encontramos ante un coche cuya estampa resulta imponente. A fin de cuentas, es tan voluminoso como elegante. Y si está acompañado, como es el caso, con una sobria pintura negra, el completo acabado Elegance y unas llantas de aleación de 20 pulgadas, el resultado es todavía mejor.
Con la cinta métrica en la mano, el modelo alemán alcanza los 4,86 metros de largo (10 centímetros más que un Passat), 1,87 de ancho y 1,45 de alto, combinado con una batalla de 2,84 metros. En cualquier caso, estos datos no deben despistarnos, ya que el Arteon equipa la misma plataforma modular que los Golf, Passat o Tiguan; la omnipresente MQB.
Al acceder al habitáculo y acomodarse en el puesto de conducción, hay dos aspectos que resultan destacables: la calidad de realización del conjunto y lo fácil que es sentirse cómodo al volante... desde el primer momento.
Ahora bien, sin que resulte una crítica, el contrapunto lo encontramos en el diseño, que no es el más rompedor del mundo. De hecho, muchos elementos son similares a los que emplea, sin ir más lejos, un compacto como el Golf. Hablo del volante multifunción, la mayoría de los mandos, el selector del cambio automático...
Detalles que pasan desapercibidos cuando compruebas la gran habitabilidad que ofrece en las plazas traseras. En este sentido, el espacio para las piernas es sobresaliente y la anchura muy buena para dos adultos (y justa para tres). La altura tampoco es mala, pero, al igual que el sucede con el acceso, se ve limitada por la pronunciada caída de la carrocería en la parte trasera.
En el caso del maletero, también ofrece buenos registros, con una capacidad de 563 litros y unas formas realmente aprovechables. Además, el portón, que asegura un acceso cómodo al espacio de carga, cuenta con apertura y cierre eléctricos.
Con dos turbos y 240 CV de potencia
Sin duda, el motor es el gran protagonista de esta unidad. Estamos hablando del bloque de ciclo diésel 2.0 TDI, con dos turbos y 240 CV de potencia, que entrega un par máximo de 500 Nm entre 1.750 y 2.500 rpm.
En todos los casos, se asocia a dos elementos clave: la tracción total 4MOTION y la transmisión automática de doble embrague DSG, con siete marchas. Con todos estos elementos trabajando en conjunto, el consumo medio alcanza los 5,9 litros cada 100 kilómetros; algo más de 7,0 durante nuestra prueba.
Lo más destacable es su respuesta a bajo régimen, aunque no entregue la potencia con el mismo refinamiento que lo haría una mecánica de idéntica 'caballería', pero con arquitectura de seis cilindros. En cualquier caso, no es obstáculo para que declare unas grandes prestaciones: alcanza los 245 km/h y acelera de 0 a 100 en 6,5 segundos.
Sorprendentemente ágil
En marcha, llama la atención lo dinámico que resulta, así como la gran sensación de aplomo que transmite; sobre todo, teniendo en cuenta su peso y dimensiones. En este sentido, juegan un papel primordial dos elementos incluidos de serie: la suspensión adaptativa DCC y el control dinámico de la conducción, con cinco modos de funcionamiento.
Eso sí, si accionas el conocido como Eco, destinado a aumentar la eficiencia al máximo, el conjunto adolece de una respuesta tardía... y demasiado tranquila. Así que, si quieres dinamismo, acciona el Sport; es la mejor manera de disfrutar de los tramos de curvas.
Con toda la tecnología, desde 51.510 euros
En el aspecto tecnológico tampoco defrauda, comenzando por dos 'gadgets' destacados, como son el cuadro de mandos Volkswagen Digital Cockpit o el sistema multimedia Discover Pro, con pantalla de 9,2 pulgadas y control gestual. Todo, sin olvidarnos de los protocolos de conectividad para los smartphones: Apple CarPlay y Android Auto.
Por otro lado, también mantiene alto el listón, en lo que a seguridad se refiere. En este sentido, incluye elementos como el sistema activo de alerta por cambio involuntario de carril Lane Assist, el de control del ángulo muerto Side Assist y el de frenada de emergencia automática Front Assist, así como el control de velocidad de crucero adaptativo ACC.
Además, como puedes ver en el vídeo, estacionar no es ningún problema. ¿La solución? El sistema de aparcamiento asistido Park Assist, que se encarga de entrar y salir de la plaza, tanto en línea como en batería.
Ahora bien, ¿cuánto cuesta disfrutar de un coche así? Con la configuración mecánica que te mostramos y el acabado Elegance, exactamente, 51.510 euros. Ese el precio a pagar por disfrutar de tan elevadas dosis de elegancia, potencia y tecnología... Eso sí, si te parece demasiado, tal vez, te interese saber que el precio de la gama arranca en 36.660 euros.
Volkswagen Arteon Elegance 2.0 TDI 240 CV DSG 4MOTION