Tesla y Ferrari son dos compañías dedicadas a la fabricación de automóviles, pero su perspectiva del negocio es muy distinta. Los primeros centran todos sus esfuerzos en los coches eléctricos, mientras que los segundos son más reacios al proceso de electrificación. Esto nos lleva a preguntarnos por qué dos empresas tan diferentes tienen un comportamiento similar en bolsa.
Tesla ha crecido exponencialmente en los últimos años, llegando a colarse entre las 100 marcas mejor valoradas del mundo en 2016. En solo cinco años ha ascendido hasta la 14º posición, con un valor de unos 31.160 millones de euros, aunque el incremento del 184% desde 2020 refleja mejor su notable desarrollo.
Galería: Ferrari 296 GTB
Ferrari, por su parte, es un mito de la automoción, con más de siete décadas de historia. Logró un crecimiento del 12% de su valor respecto a 2020, para un total de cerca de 6.200 millones de euros. Estas cifras sitúan a Tesla y Ferrari como los fabricantes de automóviles con un mejor porcentaje, a pesar de ser muy diferentes.
¿Por qué Tesla ha crecido tanto?
La compañía estadounidense recibió un pedido de 100.000 unidades por parte de Hertz, empresa dedicada al alquiler de coches. Esta demanda reportó alrededor de 3.600 millones de euros en ingresos para Tesla, que ha superado a otros gigantes como Facebook y está cerca de Apple, Microsoft o Amazon.

No obstante, la razón por la que Tesla crece en bolsa en porque siempre permanece en especulación, es decir, no busca disfrutar de los bienes que adquiere, sino que los compra para sacar un beneficio con su futura venta. La baja preocupación de los inversores también se explica por la cantidad de vehículos que venden, y es que el Model 3 fue el coche más adquirido en Europa en el mes de septiembre.
¿Por qué Ferrari sigue subiendo su valor?
Ferrari ha establecido un nuevo récord al superar los 200 euros por acción. Por el momento, su enfoque no está puesto en la electrificación total de su gama, algo que será obligatorio si quieren seguir vendiendo coches en Europa a partir de 2035.
El presidente de la compañía, John Elkann, indicó hace unos meses que existe "una oportunidad dispuesta por la electrificación, la electrónica y otras tecnologías que están empezando a estar disponibles, y que nos permitirán hacer productos todavía más únicos y distintivos".

La marca de Maranello ya ha experimentado con modelos electrificados, como con el 296 GTB o el SF90 Stradale, y hay que sumar la reciente unión con Jony Ive y su empresa, LoveFrom, que puede hacer que la relación con la tecnología en Ferrari aumente aún más. Para quienes desconozcan el nombre de Ive, se trata de uno de los diseñadores que participaron en artículos de Apple como los iMac, iPhone o iPad.

Tesla y Ferrari, por tanto, son dos empresas que no comparten ideología, pero que siguen con valores positivos en bolsa. Las razones son claras y es que, aunque uno apueste por la electricidad total (el futuro de la automoción), el otro evoluciona para que no se note el cambio, y eso hace que los grandes inversores estén tranquilos, porque no habrá grandes oscilaciones del mercado.