Si te propones la compra de un Porsche 911 nuevo, te encontrarás con una interminable lista de opciones de personalización, desde colores especiales hasta tapicerías o costuras, pero hace cuatro décadas, si eras un cliente lo suficientemente importante, podías conseguir que Porsche modificara la carrocería de un 911 Turbo a tu gusto.

Esta es la historia del Porsche 911 Turbo Flachbau, también conocido como 'slantnose' (morro inclinado), que incluye inspiración en el mundo de la competición, excéntricas peticiones por parte del cliente original y un minucioso proceso de fabricación.

Lo que en un principio iba a ser un modelo one-off para el cliente VIP en cuestión, se convirtió en el opcional más caro disponible en la época para el Porsche 911 y, dado su altísimo precio y el bajo volumen de producción del coche, el 911 Turbo Flachbau sigue siendo uno de los Porsche refrigerados por aire más raros y exclusivos jamás fabricados.

Porsche 935 race car on track.

 El capricho de un cliente VIP

La historia del Flachbau comienza en el año 1976, con la llegada del mítico Porsche 935 de competición, un coche de carreras basado en el 930 Turbo y que, como el modelo de calle, escondía un motor bóxer turboalimentado de seis cilindros, de 3,0 o 3,3 litros, junto a una caja de cambios manual de cuatro marchas y tracción a las cuatro ruedas. Si bien mecánicamente estaba emparentado con el coche de calle y con el 934 anterior, el 935 tenía una identidad visual propia gracias a su frontal.

En lugar de equipar un morro tradicional de 911, tenía un frontal inclinado, tipo 'slantnose'. El 935 era el único 911 refrigerado por aire que, por motivos aerodinámicos, empleaba faros escamoteables (la versión de calle), lo que le daba un aspecto muy particular al morro. Además, resultó ser muy exitoso en competición, ganando 123 de 370 carreras durante sus seis años de periplo, aunque en 1982 la nueva normativa de la FIA terminó con su andadura.

Porsche 935 race car on track.

En cualquier caso, el 935 hizo mella en los aficionados y generó el deseo de una versión de calle con el frontal 'slantnose'. Preparadores ajenos a la marca como RUF o Kremer ofrecieron conversiones Flachbau de este estilo, pero Mansour Ojjeh, dueño de Techniques d'Avant Garde (TAG), la empresa propietaria de la marca de relojes TAG Heuer, quiso un producto oficial y para ello recurrió a Porsche.

Ojjeh, que no era un cliente cualquiera, ya que TAG y Porsche estaban colaborando en el desarrollo del motor 1,5 litros V6 de Fórmula 1 para McLaren, hizo una solicitud en el programa de 'Deseos Especiales' (Special Wishes) de Porsche, ahora conocido como Porsche Exclusive, para la fabricación de "un 935 de carreras para la calle pero con todas las comodidades, por supuesto", afirma Classic Driver.

El resultado de aquella petición fue el 935 Street, un nombre apropiado para la ocasión, ya que el coche resultante apenas se parecía al 930 Turbo en el que estaba basado. La carrocería de estilo 935 escondía el motor 3.3 bóxer del 934, pero con 380 CV, así como una pintura Brilliant Red. En total, Porsche llevó a cabo más de 500 modificaciones para lograr el 935 Street, del que existe únicamente una unidad.

Porsche 911 Turbo Flachbau

¿Cuántos Flachbau fabricó Porsche?

Tras la fabricación del 935 Street, el fabricante alemán decidió ofrecer un frontal de este tipo para el 911 Turbo entre 1982 y 1989, aunque dentro de su programa Special Wishes, ya que la carrocería debía moldearse a mano y no era por tanto un coche de producción en serie. La opción Flachbau como tal no llegó al catálogo oficial de opciones de concesionario hasta el año 1987, y costaba entonces alrededor de 22.000 euros al cambio actual.

A finales de los años 80, el Porsche 911 Turbo costaba alrededor de 60.000 euros, lo que significa que la opción valía más o menos un tercio del valor del coche. En todo caso, no resultó un extra demasiado exitoso a nivel comercial.

Porsche 935 race car on track.

Durante los ocho años que se ofreció, Porsche produjo solamente 984 ejemplares del 'slantnose' basado en el 930, aunque el Flachbau regresó con el Turbo S de la generación 964, con solo 76 unidades para todo el mundo. Más recientemente, Porsche revivió este tipo de frontal con el 935 moderno, del año 2018, basado en el 911 GT2 RS y limitado a 77 coches.

Galería: Porsche 911 Turbo Flachbau

Fuente: Porsche