La historia del mítico motor V12 de Lamborghini podría resumirse como "la búsqueda del máximo rendimiento, conservando el diseño inicial". Hablamos de un bloque que fue diseñado en 1963 por el ingeniero Giotto Bizzarrini, bajo encargo del propio fundador de la compañía italiana, Ferruccio Lamborghini.
El conocido motor propulsó los modelos insignia de la casa de Sant'Agata Bolognese durante más de cuatro décadas, con pequeños pero importantes cambios a lo largo de su vida. Desde el Lamborghini 350 GT al Miura, pasando por el Countach o el Diablo, hasta el Murciélago, que fue el último modelo en equipar un V12 basado en el desarrollado por Bizzarrini.
Casi 13 años después, tras la adquisición de Lamborghini por parte de Audi, el nuevo Lamborghini Aventador, presentado en el año 2011 en el salón de Ginebra, recuperó un bloque V12, pero se trataba de un motor totalmente rediseñado (L539) y 18 kilogramos más ligero que su predecesor.
Un poco de historia
El deseo de Ferruccio Lamborghini de empezar a desarrollar y construir coches deportivos, tras el famoso encontronazo con Enzo Ferrari, llevó al fundador de Automobili Lamborghini, gracias al éxito que había tenido con la empresa de tractores y maquinaria agrícola, a rodearse de los mejores ingenieros y técnicos del panorama automovilístico italiano de la época.
Uno de ellos fue Giotto Bizzarrini, un famoso ingeniero y empresario automovilístico italiano, a quien se le encomendó la tarea de desarrollar un motor V12 capaz de competir contra los motores que la compañía de Maranello ofrecía en sus modelos más destacados.
Partiendo de un diseño de motor ya existente, en 1963 Bizzarrini presentó el primer prototipo de V12 a 60° de Lamborghini, que aportaba interesantes soluciones técnicas, como la sincronización del árbol de levas en cabeza doble para cada bancada o la lubricación por cárter seco, así como unas cifras de potencia asombrosas (alrededor de 370 CV) teniendo en cuenta que el sistema de combustible seguía consistiendo en seis carburadores Weber de doble cuerpo.
Primeras versiones en la década de 1960
El primer V12 de Lamborghini diseñado por Giotto Bizzarrini se lanzó en 1963 bajo el capó del 350 GT, el primer deportivo producido por la empresa de Sant'Agata Bolognese. El V12 en cuestión tenía una cilindrada de 3.464 cm3, un sistema de lubricación convencional y una potencia inicial de 270 CV.
En 1966, el 350 GT fue sustituido por el 400 GT que, como su nombre indica, montaba un V12 de 4,0 litros. La cilindrada era exactamente de 3.929 cm3 (82 mm de diámetro y 62 mm de carrera). La potencia de esta versión alcanzaba los 320 CV a 6.500 rpm.
Ese mismo año debutó el Lamborghini Miura, un coupé deportivo con una nueva disposición en la que el V12 del 400 GT se montaba transversalmente entre el habitáculo y el eje trasero. El motor tenía aquí una potencia total de 350 CV, conseguida con modificaciones que incluían cuatro carburadores de tres cuerpos en lugar de seis cuerpos gemelos.
Motor en posición longitudinal
Tras el enorme éxito del Miura, en 1971 Lamborghini lanzó el revolucionario Countach, un coupé deportivo de líneas aerodinámicas equipado con una versión adaptada del motor de 4,0 litros. Entre los principales cambios estaba la disposición longitudinal del motor con la caja de cambios justo bajo el habitáculo, para mejorar la distribución del peso en la parte central del coche. La potencia del motor aumentó a 375 CV.
Posteriormente, se produjeron otras versiones del Countach en las que se montaron otras dos evoluciones del V12: el de 4,8 litros y 375 CV, y el de 5,2 litros y 455 C, entre los años 1985 y 1990.
Más de 400 CV
En 1990 llegó el momento del Diablo, que tres años más tarde se convirtió en el primer superdeportivo de Lamborghini en ofrecer una versión con tracción a las cuatro ruedas, el VT. El Diablo estaba equipado con un V12 de 5.707 cm3 (87 mm de diámetro y 80 mm de carrera) capaz de producir una potencia máxima de 492 CV a 6.800 rpm y un par máximo de 580 Nm a 5.200 rpm.
Una de las principales innovaciones de este motor fue la introducción de un sistema de inyección electrónica en lugar de los carburadores Weber de doble cuerpo. En los años siguientes, la cilindrada aumentó a 6,0 litros para obtener potencias superiores a los 550 CV.
La última actualización del V12 diseñado por Bizzarrini en 1963 se desarrolló con el Murciélago, que estuvo a la venta de 2001 a 2010. El deportivo de la empresa de Sant'Agata Bolognese podía aprovechar las prestaciones de un motor que primero se incrementó hasta los 6.192 cm3 y que era capaz de entregar 580 CV y 650 Nm de par máximo, y luego hasta los 6.496 cm3 para una potencia máxima de 640 CV (con la evolución LP640) que finalmente se convirtió en 670 CV en el Murciélago LP670-4 SV.