El máximo responsable de Aston Martin, Andy Palmer, ha anunciado recientemente la intención de la compañía de desarrollar un nuevo motor, llamado a sustituir al bloque de ocho cilindros que se ofrece actualmente en la mayoría de sus modelos, y que tiene su origen en Alemania, ya que lo fabrica Mercedes-AMG y, salvo por algunas pequeñas diferencias, es el mismo motor que da vida al Mercedes-AMG GT y al resto de productos V8 de la firma de Affalterbach.
Este bloque 4.0 biturbo, que en los productos de Gaydon ofrece entre 510 y 550 CV, según el caso, tiene los días contados, ya que Mercedes-AMG ha hecho pública su intención de sustituir esta mecánica en su catálogo por unidades turboalimentadas de cuatro cilindros. Y esto, como es lógico, también afecta al fabricante de Gaydon, que ya está pensando en una alternativa para el Vantage, el DB11 de acceso y el todocamino DBX.
Galería: Aston Martin DB11 V8 2018
En conversaciones con la revista americana Car and Driver, Palmer ha asegurado que Aston Martin desarrollará un nuevo motor propio, en concreto un 3.0 V6 híbrido, que contaría con algún tipo de electrificación; es decir, para entendernos, habría una unidad eléctrica para compensar la pérdida de cilindros.
Este nuevo bloque de seis cilindros se fabricaría en Reino Unido y, aunque Palmer no ha adelantado cifras de potencia, sí ha asegurado que tendrá que ser al menos tan potente como el V8 de AMG al que sustituirá.
Si bien la firma de Gaydon no tiene experiencia con motores de arquitectura V6, a lo largo de los años sí han fabricado muchos bloques de seis cilindros en línea. El desarrollo de este nuevo motor se ha visto facilitado por la pausa en el programa de modelos eléctricos de Lagonda, cuyo futuro es incierto en estos momentos.
"La clave es el sonido. Poner a punto el escape para que suene como un Aston Martin. Obviamente podemos usar el sistema híbrido y el motor eléctrico para apoyar y compensar la pérdida de cilindrada con asistencia eléctrica. Mientras se sienta como un V8 y suene majestuoso, me parece la solución más sensata, y mucho más de lo que sería para nosotros un cuatro cilindros".
De momento, la continuidad del motor V12 de Aston Martin está asegurada, aunque la producción del bloque de 5,2 litros biturbo, que actualmente se fabrica en la planta de Ford en Colonia (Alemania), pasará a llevarse a cabo en Inglaterra, junto al futuro V6. Según datos de la propia compañía británica, durante el pasado 2019 vendieron 1.780 vehículos con motores V12, es decir, casi un tercio de su producción total.
"Espero que el V12 aguante todavía un buen tiempo. Está claro que a largo plazo no durará, pero desde luego en los próximos años podemos seguir haciendo motores de doce cilindros y los podemos hacer menos contaminantes. Será un día triste cuando veamos desaparecer el motor V12 de un Aston", afirma Palmer.
Fuente: Car and Driver