Desde su puesta de largo, allá por el mes de junio, el BMW Serie 8 Coupé 2018 ha generado una riada de fans incondicionales. Para aquellos afortunados que puedan permitirse la adquisición de este atractivo modelo, el preparador AC Schnitzer propone una serie de mejoras estéticas, mecánicas y de chasis, que se presentarán en el salón de Essen, durante este mes de diciembre.
Comenzamos por el plato fuerte, la dosis extra de caballería, que engloba a los dos motores disponibles. Si recuerdas, el bloque turbodiésel, de 3,0 litros y seis cilindros en línea, entrega 320 CV a 4.400 rpm y 680 Nm entre 1.750 y 2.250 vueltas. Pues bien, el especialista alemán eleva estas cifras a 379 CV y 780 Nm.
En cuanto al propulsor de gasolina 4.4 V8, biturbo, desarrolla originalmente 530 CV entre 5.500 y 6.000 rpm y 750 Nm entre 1.800 y 4.600 vueltas. Después de actuar con la 'varita mágica', AC Schnitzer logra la cifra mágica de 600 CV y 850 Nm; es decir, el mismo registro de potencia que todo un M5.
La imagen más poderosa del BMW Serie 8 Coupé viene dada por cuatro nuevas salidas de escape, que prometen un sonido más grave, y una altura libre al suelo rebajada, por la instalación de muelles específicos. En total, el coche queda 20 milímetros más cerca del suelo en la parte delantera y 10 en la trasera.
Por supuesto, no nos queremos olvidar de los dos juegos de llantas de aleación disponibles, denominados AC1 y AC3 por AC Schnitzer, que pueden ser de 20 o 21 pulgadas.
¿Y qué pasa con los componentes de fibra de carbono? Sí, son la guinda del pastel y están formados por un splitter delantero, respiraderos en el capó, taloneras laterales, difusor posterior y alerón trasero. Como para pasar desapercibido...
AC Schnitzer aún no ha mostrado el habitáculo del vehículo, pero la compañía promete inserciones de aluminio para aumentar la calidad percibida. Ahora, ya solo nos queda preguntar ¿que Serie 8 Coupé prefieres? ¿El convencional o esta preparación?