¡Qué tiempos aquellos en los que se podía elegir entre un Renault Clio R.S., un SEAT Ibiza FR o CUPRA, un Peugeot 208 GTi o un Volkswagen Polo GTI, entre otros! Tristemente, esta raza de utilitarios deportivos está prácticamente sentenciada por las (malditas) emisiones. Por eso, probar el Hyundai i20 N 2022 nos hace regresar a aquellos divertidos tiempos de esas benditas 'pelotillas'.
Para ponerte en situación, estamos ante un vehículo con 204 CV, extraídos del motor turbo y tetracilíndrico 1.6 T-GDi, dotado además de una caja manual de seis velocidades y de un autoblocante mecánico con control electrónico en el eje delantero. Pinta bien, ¿eh?
Galería: Prueba Hyundai i20 N 2022
Hyundai i20 N, tecnológicamente avanzado
La cosa no acaba ahí, porque también cuenta con el sistema Rev-matching (se acciona desde el botón rojo del volante), que realiza automáticamente el punta-tacón en reducciones de marcha. Tampoco faltan diferentes programas de conducción, incluido el personalizable Custom, ni desarrollos cortos, como mandan los cánones.
El escape con sonido variable (es realmente bestial en el programa Sport+) completa unos argumentos técnicos de primer nivel, puestos a punto en el mítico circuito de Nürburgring. No solo es un coche veloz, sino también muy trabajado en el plano dinámico.
Exterior llamativo
En el apartado estético, la personalización resulta evidente al primer vistazo, principalmente la zaga, donde resaltan el alerón trasero fijo, el marcado difusor y la salida de escape cromada, junto con detalles en color rojo también presentes en otros puntos de la carrocería.
En el lateral, las llantas de aleación miden 18 pulgadas y ocultan parcialmente grandes discos ventilados delanteros y macizos traseros, con pinzas de color rojo. Y si nos desplazamos al frontal, observaremos un paragolpes y una trama de la parrilla específicos, además del logotipo N y un capó con líneas muy marcadas. Por el color Performance Blue hay que pagar 480 euros.
Interior especial
Por su parte, el interior queda personalizado principalmente con el volante deportivo con mandos satélites y con los asientos de tipo baquet, que sujetan bien y no encajonan el cuerpo en exceso. Por poner algún pero, me hubiera gustado que la inclinación del respaldo se regulara por una rueda y que el reposacabezas integrado estuviera en una posición algo más elevada.
Seguro que te van a encantar todos los datos de telemetría que vas a poder encontrar en la pantalla central de 10,25 pulgadas, como por ejemplo las fuerzas G, el tiempo por vuelta, la presión del turbo o hasta el porcentaje de uso del freno.
Por cierto, no está de más decir que el Hyundai i20 N 2022 mantiene el carácter práctico del resto de la gama, gracias a un más que correcto espacio para adultos de talla media en las plazas traseras y a un práctico maletero de 351 litros con doble piso.
Comportamiento adictivo
La naturaleza deportiva de este coche surge desde los primeros kilómetros. Como decía antes, el escape puede resonar mucho y la suspensión fija, sin ser extrema, deja poco margen al confort al pasar por baches o los temidos 'guardias tumbados'. Además, la dirección, con apenas 2,16 vueltas entre topes, gira poco.
El empuje mecánico es excelente y además se transmite al suelo de una forma muy eficaz, sin tirones ni pérdidas de motricidad, ni siquiera a las salidas de las curvas, lo que demuestra lo bien trabajado que está este coche.
Sus contenidas dimensiones (apenas 4,07 metros de longitud) y su peso en vacío de tan solo 1.190 kilos le proporcionan una agilidad y una rapidez de reacciones brillantes, de tal forma que supera las curvas más 'ratoneras' en un abrir y cerrar de ojos.
Por cierto, no hace falta reducir a segunda marcha en las horquillas de 180º gracias a los desarrollos cortos antes comentados y el tacto del pedal de freno es soberbio, ya que ofrece mucha firmeza desde el inicio del recorrido.
Quedaría un coche perfecto si, en conducción deportiva, no se produjera algún que otro tirón al subir de velocidad y si hubiera más diferencias de empuje entre los diferentes programas de conducción.
Si piensas que los consumos son disparatados, nada de eso, ya que podemos movernos en horquillas de entre 5,5 y 9,0 litros cada 100 kilómetros, practicando desde una conducción ecológica hasta otra muy deportiva. Son registros siempre cabales.
Equipamiento de serie y precio
Si a todo este cóctel emotivo sumamos un equipamiento de serie muy amplio, el resultado es un coche que muchos querrán guardar en su garaje. No en vano, viene con climatizador automático, navegador, Android Auto y Apple CarPlay, equipo de audio BOSE, llave inteligente...
Todo, por 27.410 euros, con los descuentos incluidos por la marca coreana (30.890 sin ellos). Ahora que no hay prácticamente ningún rival de este tipo, solo queda dar las gracias a Hyundai por mantenerlo en el mercado y pasar por el concesionario para llevárnoslo a casa. Pero antes, disfruta de la videoprueba adjunta, donde puedes acercarte aún más a las excitantes sensaciones que proporciona este fantástico deportivo de bolsillo.
Hyundai i20 N 2022