El Shelby Cobra original no era precisamente un peso pesado. Su bastidor tubular portaba una carrocería de aluminio y, con el motor de 427 pulgadas cúbicas (7,0 litros) instalado en los Cobra Mark III, su peso rondaba los 1.500 kilos. Sin embargo, cuando empezaron a aparecer kits del Cobra con carrocería de fibra de vidrio, el peso se redujo a unas 2.200 libras (997 kilos), dependiendo del motor.
Ahora sabemos que hay un Cobra de fibra de carbono fabricado por Classic Recreations. La empresa tiene permiso de Shelby para construir coches oficiales a partir del Cobra con numeración CSX, y aunque no sabemos el peso total de este nuevo coche, sabemos que la carrocería de fibra de carbono desnuda pesa solo unos 40 kilos (88 libras).
Eso es todo el conjunto de la carrocería, que según las fotos incluye el capó y las puertas. Y debemos confesar que tiene un aspecto absolutamente impresionante.
Galería: Shelby Cobra con carrocería de fibra de carbono
Oficialmente, se llama Diamond Edition Carbon Fiber Shelby Cobra Race Car. La palabra clave en esa frase es 'coche de carreras', aunque el comunicado de prensa oficial de Classic Recreations no lo define realmente como un vehículo de competición.
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Eso sí, tampoco califica a este Cobra especial como apto para circular por las calles. Lo que sí dice es que el Cobra Diamond Edition rivalizará contra los supercoches modernos y ofrecerá más confort y una mejor experiencia de conducción en comparación con los modelos anteriores.
"Carroll Shelby me enseñó la importancia de superar los límites a través de la innovación y la pasión", dijo Jason Engel, fundador y vicepresidente de diseño e ingeniería de Classic Recreations. "Un sueño de Carroll siempre fue colocar el motor de mayor potencia posible en el coche más ligero y ágil que se pueda imaginar y es un honor para nosotros haber cumplido ese reto".
El Cobra con carrocería de fibra de carbono utilizará un chasis completamente nuevo con ingeniería moderna: nada de bastidores tubulares. Bajo el capó se encuentra un bloque V8 Coyote de Ford de tercera generación que, con un compresor opcional, genera más de 800 CV dirigidos a las ruedas traseras.
Las tareas del cambio recaen en una caja manual Tremec T56 de seis velocidades. A la hora de frenar, entran en juego los frenos Wilwood con pinzas de seis pistones en las cuatro ruedas. A la vista de los datos, parece que este Cobra es una máquina muy seria.
Como tal, tiene un precio muy elevado, e incluso si puedes permitírtelo, no te será fácil conseguir uno. Solo se han previsto diez unidades de producción, y cada una de ellas tiene una tarifa de 1,2 millones de dólares (1,08 millones de euros).
Fuente: Shelby