Cualquier persona que acelere más de la cuenta se expone a la pérdida de puntos del carné y a una multa económica por no respetar los límites de velocidad. Y si hasta hace unos años, solo la policía era capaz de poner multas, la tecnología y la vida moderna trajeron consigo la llegada de los radares de velocidad. Y de diferentes tipos, además, que 'velan' por nuestra seguridad.

Entre ellos, se encuentran los radares de tramo, que se basan en cámaras de infrarrojos, detectores de velocidad y un sistema de procesamiento de imágenes, para calcular la velocidad (y por tanto, la posible infracción cometida) entre dos puntos separados por varios kilómetros. Hoy en día son bastante comunes y en Francia, por ejemplo, llevan en servicio desde el año 2012.

Galería: Radares de velocidad (fijos y móviles)

Sin embargo, parece que algunos usuarios de la vía siguen sin saber cómo funcionan estos radares. Es el curioso caso de una joven conductora francesa que, desde octubre de 2020 hasta marzo de 2021, se desplazó todos los días por la carretera de Mercureaux, un tramo de la RN57, cerca de Besançon, para ir a trabajar.

El problema es que hay un radar de tramo en esta ruta, y tampoco es reciente. De hecho, fue el primer cinemómetro de este tipo que se instaló en el país, allá por el 25 de agosto de 2012.

 

Volviendo a nuestra despistada conductora, de 22 años, fue 'cazada' en nada menos que 35 ocasiones por exceso de velocidad en dicha carretera. El problema, es que las multas no se empezaron a enviar hasta meses más tarde de cometer la primera infracción.

Una vez informada de todas sus sanciones por exceso de velocidad, la joven decidió recurrirlas con el apoyo de su padre. En el juicio, explicó que no sabía cómo funcionaba el radar de velocidad. Según ella, si hubiera recibido la primera multa con rapidez, habría dejado de exceder el límite de velocidad.

A pesar de que "el desconocimiento de la ley no exime de su cumplimiento", el tribunal fue bastante indulgente, muy indulgente incluso, ya que no tendrá que pagar los 2.600 euros acumulados de multas y mantendrá todos los puntos de su permiso de conducir.

Y es que, aunque la ley no establece ningún plazo en materia de notificación de multas, el tribunal reconoció que las notificaciones de las sanciones no se enviaron en un tiempo razonable.

No es la primera vez que se toma una decisión en este sentido, ya que, como informan desde el diario Est Républicain, el tribunal de policía de Vesoul decidió el 3 de diciembre de 2021 eximir de sanción a otro conductor que fue sorprendido en la misma carretera de Mercureaux.