Muchos son los coches que presumen de tener una aceleración brutal. El Rimac Nevera, el Pininfarina Battista o el Mercedes-AMG ONE son solo unos ejemplos, pero el vehículo del que hablamos ahora es más potente que cuatro Bugatti Chiron juntos.
Se trata de un dragster basado en el Corvette C4 de 1984. El automóvil no cuenta con un bloque V8 sobrealimentado o con una mecánica eléctrica que lo impulse, sino que funciona con un motor a reacción. Además, este ejemplar se encuentra a la venta.
Galería: Corvette C4 con motor a reacción de 7.000 CV
Según la página web de Classic Auto Mall, un distribuidor de Morgantown, en Pensilvania (Estados Unidos), es el lugar donde está a la venta este C4. No obstante, no es un deportivo de los años 80 como tal, sino que el chasis y la carrocería están inspirados en él.
Meng Race Specialties, compañía de Gilbertsville, también en Pensilvania, fue la encargada de ensamblar todos los elementos. En la vista frontal y en la de perfil, el vehículo parece un dragster de la época, pero la trasera revela el 'monstruo'.

La parte posterior destaca por el enorme motor Westinghouse J34/34-A, derivado de los aviones Vought V3D Skynight y McDonnell F2H Banshee, dos aeronaves de defensa estadounidenses, en servicio durante la Guerra Fría.

Dicho motor es capaz de generar más de 7.000 CV de potencia y, gracias a los apenas 1.088 kilogramos de este Corvette C4, el modelo es capaz de alcanzar los 400 km/h en el cuarto de milla.
En la prueba de 402 metros marca esta espectacular velocidad, pero es aún más escalofriante cuando se compara con el coche más veloz en el 0 a 100 km/h del mundo, el Rimac Nevera. El eléctrico puede pasar de parado a 100 km/h en solo 1,97 segundos y hacer el cuarto de milla en 8,6 segundos, pero apenas llega a los 270 km/h en esa distancia.
El coche con motor a reacción participó en varios campeonatos y fue diseñado a medida para un propietario tejano. Entre el diseño y las continuas mejoras a lo largo de los años, el vehículo ha costado más de 150.000 dólares (cerca de 127.000 euros al cambio actual).

Ahora, el coche a reacción se vende por un precio de 39.500 dólares (unos 33.400 euros al cambio), menos que un Toyota GR Yaris, una ganga considerando la enorme potencia de la que dispone.
Fuente: Classic Auto Mall