El Renault Clio es uno de los modelos más conocidos de la firma de Bologne-Billancourt en toda Europa y, especialmente, en España, donde se convirtió en el sucesor del mítico Renault 5. Fue presentado en 1990 y también es conocido como Symbol, Taxi Express y Lutecia según el mercado. Aparte de sus versiones deportivas, el Clio ha sido el coche con el que muchos jóvenes conductores aprendieron a conducir.

Los vehículos más pequeños y sencillos son a veces los más agradables de conducir, y un Clio de segunda generación recibió la atención del canal MasterMilo en YouTube. Si has visto vídeos de esos locos, probablemente sepas a qué nos referimos.

No es la primera vez que hablamos de vehículos a los que se les ha instalado un sistema de cadenas u orugas para que puedan circular por terrenos complicados como la nieve. El CUPRA Ateca de la galería anterior es un buen ejemplo.

Si todavía no lo has hecho, te invitamos a que descubras el video que acompaña a esta noticia, donde el pequeño utilitario francés ahora dispone de orugas como si de un carro de combate se tratase. El proyecto se inició hace unas semanas y ahora, por fin, se mueve por sus propios medios e incluso (más o menos) dispone de un sistema de dirección.

Esas cadenas son obviamente demasiado pesadas para el pequeño motor del Clio, pero parece que el propulsor de cuatro cilindros funciona bien, a pesar del humo blanco que sale del tubo de escape... al menos, eso esperamos.

CUPRA Ateca con orugas

Sin embargo, no podemos decir lo mismo del embrague, que está haciendo todo lo posible para enviar la potencia a las pesadas cadenas. En algún momento hacia el final del vídeo, el embrague básicamente muere y ese es el final del Clio con orugas, al menos por ahora.

Leyendo los comentarios, hay algunas ideas interesantes para el futuro del proyecto. Un cañón de patatas en el techo sería un buen complemento para el generador de niebla que interrumpe la visión al 'enemigo', por ejemplo.

CUPRA Ateca con orugas

Alguien incluso ha sugerido que sería genial que pudiéramos ver cómo se desmonta el embrague después de asistir a su 'suicidio' en directo, aunque ya supondrás lo que te puedes esperar. También hay algún comentario sobre que este Clio transformado emite tanto humo como un carro de combate T-55 de hace unas cuantas décadas. En fin, otra transformación más sin mucho sentido.