La división M de BMW se ha reforzado considerablemente en los últimos años, con la llegada de nuevos integrantes. Hablamos, entre otros, de los X3 M, X4 M, M8 Coupé, Cabrio y Gran Coupé... tanto en la versión estándar como en la optimizada Competition.
Whichcar.com.au ha tenido la oportunidad de hablar con Markus Flasch, CEO de BMW M, sobre los planes de futuro y los desafíos que tiene ante sí este departamento. Al respecto del incremento de la familia y la posible pérdida de exclusividad, el directivo ha negado ese extremo, al asegurar que los coches M son un complemento único de los BMW y van a seguir siendo así.
Desde luego, el 'ojito derecho' de Flasch y de muchos clientes es el M2 Coupé, ya que representa la esencia que mostraban los M clásicos. "Es el coche de acceso a la gama M, pero también el más deportivo y el más emocionante", aseguró.
Sobre la posible canibalización de ventas entre el M3 y el M4 Coupé, Flasch ha explicado que estos dos coches no compiten entre sí. Además, ha dicho que está muy satisfecho con la gama actual de BMW M y que se mantendrá de esta manera.

En cinco años, la división M ha crecido más del 200% y, aunque las ventas son mejores que nunca, todavía queda la pregunta de si 'llevar' a los clientes hacia coches de altas prestaciones podría estar socavando los esfuerzos de BMW en la movilidad eléctrica.
Al respecto, Flasch ha explicado que se trata de equilibrar la cartera de coches y que los modelos M alcanzan la mayor eficiencia posible, dentro de la prestaciones que otorgan. Por lo tanto, la familia M convivirá con la saga 'i' sin ningún tipo de problema.
BMW M, una familia de altos vuelos
¿Y qué hay de posibles modelos M electrificados? Flasch ha explicado que no van a comprometer el carácter distintivo que tienen sus coches, pero eso no significa que no se vayan a apoyar en motores eléctricos para ganar potencia y prestaciones. "Un vehículo electrificado tendrá que asumir el papel del predecesor. Sé que hay límites físicos, pero vamos a lograr ese objetivo".
Por último, al preguntarle por potencias futuras, ha afirmado que no hay un límite establecido. "Los caballos tienen que estar bajo control. Si retrocediésemos 15 años, hablar de 625 CV en una berlina parece imposible, pero el M5 Competition lo puede conducir cualquiera de forma segura".
Por lo tanto, parece que la meta es lograr que los BMW M sean capaces de controlar la fuerza mecánica, con independencia de la cifra plasmada en la ficha técnica.
Fuente: whichcar