A la espera de lo que anuncie el nuevo Audi RS 3 Sportback, el compacto deportivo más potente del momento es el Mercedes-AMG A 45 S 4MATIC+, que desarrolla 421 CV y 500 Nm de par, a partir de un motor turboalimentado de gasolina, con 2,0 litros y cuatro cilindros en línea, de última generación.
Pero todo es mejorable, no cabe duda; si no, que se lo pregunten al prestigioso preparador RaceChip, que se las ha apañado para sacar más caballería de este bloque.
En concreto, la mecánica alcanza 491 CV y 541 Nm, es decir, 70 CV y 41 Nm extra. Con esta nueva configuración, los especialistas de la compañía alemana no dudaron ni un segundo en poner a prueba el coche en el mejor escenario posible, una Autobahn sin límites de velocidad.
En este escenario, descubren que el modelo 'vitaminado' de Stuttgart tarda tan solo 9,16 segundos en pasar de 100 a 200 km/h. Lo puedes descubrir en el vídeo adjunto, donde también se muestra al coche en el banco de potencia.
La preparación consta de una 'simple' reprogramación de la centralita. No hay que tocar ningún elemento para aumentar la potencia, ya que el turbo es de amplias dimensiones y trabaja a un nivel elevado de soplado.
RaceChip cobra 699 euros por esta mejora, pero también hay otra 'repro' más barata, por 399 euros, que incrementa la potencia y el par en 58 CV y 33 Nm, respectivamente.
Si estas dosis de fuerza no te parecen suficientes, recuerda que RENNtech propone 600 CV para el compacto alemán, como puedes ver en el enlace de arriba, aunque en este caso, sí se cambian el turbocompresor y el sistema de escape.
Cabe recordar que el Mercedes-AMG A 45 S 4MATIC+ es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3,9 segundos y alcanza una velocidad máxima de 270 km/h, limitada electrónicamente. El sistema de tracción total es conectable automáticamente mediante un embrague multidisco.
Como complemento ideal, se encuentra la tecnología AMG Torque Control, que mediante otros dos embragues situados en el tren trasero, permite modificar la distribución del par motor entre las ruedas posteriores. En fin, un coche ya ideal de serie, que se puede optimizar a través de diferentes preparaciones.
Fuente: RaceChip