Fue en el salón de Ginebra de 2015 donde Ferrari presentó el 488 GTB como reemplazo del 458 Italia. Para la cita de este año, el Gran Turismo Berlinetta dejará paso al nuevo F8 Tributo, que llega con la vitola de ser el Ferrari con el motor V8 más potente en la historia de la compañía.
Con 720 CV y 770 Nm de par máximo, generados por el conocido bloque de 3,9 litros con dos turbocompresores, el nuevo F8 Tributo está a la altura del magnífico 488 Pista, ya que ofrece un extra de 50 CV y 10 Nm sobre el GTB. Eso se traduce en una increíble aceleración de 0 a 100 en tan sólo 2,9 segundos, una décima menos que el GTB. Además, es capaz de alcanzar los 200 km/h en tan solo 7,8 segundos (medio segundo menos).
Si continuamos pisando el acelerador sin piedad, el nuevo Ferrari F8 Tributo es capaz de llegar a los 340 km/h, 10 más que el GTB. Todo, sin la aparición del fenómeno conocido como 'turbo lag'. Al menos, así lo promete Ferrari...
El incremento de las prestaciones no solo se ha logrado con la caballería extra, sino también, estableciendo una dieta para este superdeportivo. De hecho, el nuevo F8 Tributo pesa 40 kilos menos que el 488 GTB, marcando tan solo 1.330 kilos, con todas las opciones aligeradas incluidas.
Otro dato que no debemos pasar por alto es el incremento de un 10% en la eficiencia aerodinámica. La carrocería rediseñada no solo es más elegante que nunca, sino que también muestra un nuevo lenguaje de diseño y rinde tributo al pasado, al vincularlo con el 308 GTB original.
Otro guiño a la rica herencia de Ferrari se encuentra visible en la parte posterior, donde la cubierta del motor con rejillas recuerda al icónico F40.

Ferrari también ha renovado el habitáculo, al introducir salidas de aire redondas y un volante rediseñado. Los controles también son nuevos, al igual que la consola central, que aloja una pantalla táctil de 7,0 pulgadas. Los millonarios ya tienen nuevo objeto de deseo...