Durante muchos años, el Ford Focus ha sido una pieza clave de la gama del fabricante americano en nuestro país. Y durante el pasado 2020, el compacto de la casa fue el modelo más vendido de Ford en España, con 12.755 unidades, por delante del Ford Puma (8.500) y del Ford Fiesta (4.715).

Una de las principales novedades recientes del catálogo del Ford Focus son sus variantes microhíbridas de gasolina, o mild hybrid, que recurren a un sistema eléctrico de 48 voltios, a una pequeña batería de litio y a un motor eléctrico, para ahorrar unas décimas en el consumo homologado.

Nosotros acabamos de probar la variante más potente, que está disponible desde 26.310 euros (PVP en acabado Titanium), si bien Ford ofrece descuentos de algo más de 5.000 euros.

Galería: Ford Focus 1.0 EcoBoost MHEV 155 CV, prueba

Tecnología mild hybrid (MHEV)

El nuevo sistema de hibridación ligera del Ford Focus está disponible para el motor 1.0 EcoBoost, en dos versiones diferentes, de 125 o 155 CV, en ambos casos junto a una caja de cambios manual de seis velocidades. Gracias a esta solución, el modelo cuenta en nuestro país con la etiqueta Eco de la DGT, con las ventajas que ello conlleva.

En esencia, una pequeña unidad eléctrica hace las funciones de motor de arranque y alternador, pudiendo también apoyar en aceleraciones al bloque de combustión, con hasta 16 CV y 50 Nm adicionales. La batería de iones de litio de este sistema, ubicada bajo el maletero, tiene una capacidad de 0,48 kWh y sirve para acumular la energía recuperada en deceleraciones y frenadas, que después es utilizada para alimentar el motor eléctrico.

Ford Focus 1.0 EcoBoost MHEV 155 CV, prueba
Ford Focus 1.0 EcoBoost MHEV 155 CV, prueba
Ford Focus 1.0 EcoBoost MHEV 155 CV, prueba

Gracias a este sistema, el consumo medio homologado es de 5,4 litros cada 100 kilómetros, si bien anuncia unas prestaciones bastante correctas. Despacha el 0 a 100 km/h en 9,2 segundos y es capaz de alcanzar una velocidad máxima de 211 km/h.

ST-Line X, con una interesante apariencia

La estética de nuestra unidad de pruebas es bastante particular, ya que luce el acabado ST-Line X, de corte deportivo, con detalles tan interesantes como las llantas de aleación de 17 pulgadas, en acabado Rock Metallic Light, que son de serie, al igual que las inserciones negras en la parrilla, la doble salida de escape, el spoiler de techo o las ventanillas traseras oscurecidas. El color de este ejemplar, denominado Rojo Fantastic, es un opcional de 750 euros.

Ford Focus 1.0 EcoBoost MHEV 155 CV, prueba
Ford Focus 1.0 EcoBoost MHEV 155 CV, prueba
Ford Focus 1.0 EcoBoost MHEV 155 CV, prueba

También se incluye de serie en el ST-Line (y en este X) la suspensión deportiva, faros LED o el distintivo lateral ST-Line, junto a asientos deportivos tapizados en tela y cuero, con costuras de color rojo, climatizador bizona, sensores de luz y lluvia, pomo del cambio ST-Line en aluminio (al igual que las estriberas de los umbrales de las puertas) o retrovisor interior antideslumbrante automático.

Una de las novedades estrenadas el año pasado en la gama Focus es la nueva instrumentación digital, basada en una pantalla de 12,3 pulgadas, que ofrece toda la información necesaria y es de fácil lectura, aunque no esperes las opciones de configuración que ofrecen otros competidores, puesto que la personalización es bastante básica. El diseño, eso sí, varía al cambiar entre los modos de conducción, denominados Normal, Eco y Sport.

Ford Focus 1.0 EcoBoost MHEV 155 CV, prueba

Para complementar este cuadro, también hay una pantalla flotante multimedia, táctil y de 8,0 pulgadas, que gobierna el sistema SYNC3 de Ford (dispone de Apple CarPlay y Android Auto, con streaming de audio vía Bluetooth, por ejemplo), así como un Head-up Display, que en este caso no proyecta la información sobre el parabrisas, sino en una moldura de plástico escamoteable, de accionamiento eléctrico.

En general, el habitáculo goza de unos materiales agradables, tanto a la vista como al tacto, sobre todo en el salpicadero y en las puertas, aunque también hay algunos plásticos duros que desentonan un poco, especialmente en las molduras de las puertas traseras.

Los asientos, por ejemplo, resultan cómodos y sujetan bastante bien, gracias a sus generosas 'orejas' laterales, tanto en el respaldo como en la banqueta. Las plazas traseras, por su parte, ofrecen un buen espacio para las piernas, aunque algo más justo para la cabeza, al menos para alguien de 1,80 metros de altura, y con el asiento delantero ajustado a dicha talla. Como suele ser habitual en este tipo de compactos, la plaza central trasera resulta estrecha.

En lo que respecta a puertos USB, no hay ninguno para las plazas traseras (solo una toma de 12 V en la consola central posterior), pero sí uno en la parte inferior de la consola y otro en la guantera del reposabrazos central. Por último, el maletero ofrece un volumen de 375 litros, o de hasta 1.354 litros en caso de abatir la segunda fila de asientos (en proporción 60:40) y cargar hasta el techo.

El precio de tarifa de esta versión, con este acabado ST-Line X, es de 27.485 euros, aunque en este caso el fabricante también puede aplicar promociones por valor de 5.762 euros, incluyendo descuentos de concesión y por financiación, dejando el precio gancho en 21.723 euros.

Un motor que cumple con nota

Sin duda la estrella de este Ford Focus es el motor 1.0 EcoBoost, que aunque tiene únicamente tres cilindros, ofrece una respuesta bastante buena y resulta muy elástico, con un empuje contundente a partir de las 2.000 rpm, aproximadamente. El sonido del motor tiene el característico traqueteo de un bloque de tres cilindros, pero se antoja bastante interesante, incluso cuando lo subimos de vueltas. 

La aportación del pequeño motor eléctrico no se nota demasiado, aunque al arrancar desde parado sí podemos apreciar que el coche tiene algo de fuelle extra al principio. Aun así, los beneficios de un sistema de hibridación ligera de este tipo deberían reflejarse en el consumo de combustible, más que en las prestaciones.

Ford Focus 1.0 EcoBoost MHEV 155 CV, prueba

En este sentido, el sistema Start/Stop también ayuda a recortar alguna décima al consumo, y este en concreto resulta muy suave. De hecho, si llevamos música puesta o vamos charlando con los ocupantes, apenas se percibe el momento en que arranca el motor tras haberse apagado, tanto por lo silencioso del proceso como por la ausencia de vibraciones.

El tacto general del coche, como suele ser habitual en Ford, es muy agradable para una conducción alegre. La dirección tiene cierto peso, es firme y también precisa, mientras que la suspensión es muy cómoda para el día a día pero, al mismo tiempo, ofrece un buen equilibrio a la hora de afrontar un tramo de curvas, ya que la carrocería no balancea mucho y el comportamiento es muy 'disfrutable' en todo tipo de carreteras.

Ford Focus 1.0 EcoBoost MHEV 155 CV, prueba

Durante nuestro recorrido de pruebas hemos conseguido un consumo medio de ordenador de a bordo de 6,4 litros cada 100 kilómetros, combinando carreteras secundarias, vías urbanas y autovía, y sin llevar a cabo una conducción especialmente eficiente, así que rebajar los 6,0 litros de media y acercarse a la cifra homologada debería ser relativamente sencillo. 

Ford Focus 1.0 EcoBoost MHEV ST-Line X 2021

Motor Gasolina, tres cilindros en línea, turboalimentado, 998 cm³
Motor Eléctrico, 16 CV + 50 Nm
Potencia 155 CV a 6.000 rpm
Par máximo 235 Nm desde 2.000 rpm
Caja de cambios Manual, 6 velocidades
0-100 km/h 9,2 segundos
Velocidad máxima 211 km/h
Consumo 5,2 l/100 km
Tracción Delantera
Longitud 4,38 m
Anchura 1,83 m
Altura 1,47 m
Peso en vacío 1.344 kg
Número de asientos 5
Capacidad del maletero 375 litros
Precio base 27.485 euros