Si mezclas la deportividad de algunos de los modelos de BMW y los potentes motores turbodiésel desarrollados en Múnich, obtendrás como resultado uno de los buques insignia más cómodos y lujosos del mundo. Pero, ¿crees que esta combinación dará lugar a un consumo excesivo?
La respuesta es no, porque el BMW X7 M50d, protagonista de esta prueba de consumo real en el trayecto entre Roma y Forlì, se ha mostrado rápido y ágil, pero también eficiente.
Eso sí, no debes dar rienda suelta al pedal del acelerador, porque los 400 CV de la mecánica turbodiésel de 3,0 litros y seis cilindros en línea, apoyada por cuatro turbocompresores, son capaces de mostrar un rendimiento tan alto como lo podría ser el consumo.
En nuestra ruta estándar de 360 kilómetros, esta versión M50d registró un gasto de 5,85 litros cada 100 kilómetros (17,09 km/l), dando lugar a un coste total de 21,06 euros. Por tanto, resulta una cifra nada preocupante, ya que, de hecho, es más eficiente que algunos de sus rivales.
Hay todocaminos de este tamaño que consumen más
Si comparamos al SUV de BMW con la competencia, encontramos vehículos con motores turbodiésel que consumen bastante más que el protagonista de esta prueba. Por ejemplo, el Mercedes-Benz GL 350 BlueTec acabó nuestro recorrido con un gasto de 7,65 litros cada 100 kilómetros (13 km/l), mientras que el Jeep Grand Cherokee 3.0 V6 Multijet II lo hizo con una lectura de 7,30 litros cada 100 kilómetros (13,7 km/l).
Algo más compactos y eficientes que el SUV alemán que nos atañe son el Mazda CX-5 2.2 Diésel 175 CV 4WD Automático (5,60 litros cada 100 kilómetros - 17,8 km/l) y el Audi Q5 3.0 TDI quattro tiptronic (5,50 litros cada 100 kilómetros - 18,1 km/l), mientras que el Mercedes-Benz Clase V 220 d obtuvo un excelente resultado, con 5,30 litros cada 100 kilómetros (18,8 km/l).
Además, cabe mencionar a otro SUV de gran tamaño, como el Range Rover Hybrid 2017, con 6,85 litros cada 100 kilómetros (14,6 km/l) y a otro todocamino compacto, como el Jeep Renegade 1.0 T3 120 CV MT 4x2, que registró 6,30 litros cada 100 kilómetros (15,8 km/l).
Ángeles y demonios en cuanto a eficiencia
El BMW X7 M50d muestra dos caras distintas en cuanto a eficiencia se refiere, dada su capacidad para moverse de forma suave y relajada o de alcanzar una gran velocidad en un espacio corto de tiempo. Basta con abusar de su acelerador para ver cómo las lecturas de consumo en el ordenador de a bordo suben a niveles exagerados para, posteriormente, caer a cifras más contenidas y razonables si hacemos una conducción 'normal'.
El X7 puede consumir una media de 13,8 litros cada 100 kilómetros (7,2 km/l) mientras se circula por el complicado tráfico de Roma, bajar hasta los 8,8 litros cada 100 kilómetros (11,3 km/l) en zonas urbanas e interurbanas y caer un poco más, hasta los 8,2 litros cada 100 kilómetros (12,1 km/l), al entrar en la autopista.
Estos datos son significativos, ya que vemos que, con una conducción ecológica para la prueba de consumo mínimo, obtuvimos un consumo de 5,0 litros cada 100 kilómetros (20 km/l), mientras que, en el test de gasto máximo, el registro subió hasta los 42,0 litros cada 100 kilómetros, un consumo que penalizó bastante en el cómputo final.
Datos:
Coche: BMW X7 xDrive M50d
Precio base: 119.500 euros
Día de la prueba: 07/05/2019
Clima: Soleado, 32 °
Precio de combustible: 1,242 euros/l (diésel)
Kilómetros de la prueba: 919
Kilómetros totales al inicio de la prueba: 3.531
Velocidad media en el tramo Roma-Forlì: 82 km / h
Neumáticos: Pirelli P Zero XL - 275/40 R22 107Y delantero 315/35 R22 111Y trasero (Etiqueta de la UE: E, B, 70 dB - C, B, 71 dB)
Consumo
Media real: 5,85 litros cada 100 kilómetros (17,09 km/l)
Ordenador de a bordo: 5,7 litros cada 100 kilómetros
En el surtidor: 6,0 litros cada 100 kilómetros
Datos económicos
Gasto real: 21,06 euros
Gasto mensual: 46,80 euros (800 km al mes)
Distancia con 20 euros: 342 km
Distancia con el depósito lleno: 1.368 km