Porsche tiene un nuevo Taycan de altas prestaciones en la recámara, y con él acaba de batir un récord de vuelta en el circuito de Nürburgring. ¡Así se empieza el año, sí señor!
Eso sí, el fabricante de Stuttgart no ha confirmado cómo se llama esta nueva versión del coche eléctrico ni ha detallado sus prestaciones. Sólo nos ha dado un tiempo. Y este Taycan 'preserie' ha rodado en nada menos que 7'07"55.
Con esta cifra, se convierte en el Porsche eléctrico más rápido en dar una vuelta sobre el asfalto de la legendaria pista. Pero también, pulveriza el anterior récord del Tesla Model S Plaid y sus 7'25"231, en nada menos 17,681 segundos.
Una nueva versión del Porsche Taycan, de récord
La marca del nuevo Taycan es 26 segundos más rápida que la del Taycan Turbo S, y está a tiro de piedra del tiempo del Rimac Nevera, con 7'05"298. ¿Qué más sabemos sobre este misterioso Porsche? Pues que recibió pequeñas modificaciones para hacerlo más seguro en circuito, como son un baquet de competición y una jaula antivuelco.
Según Porsche, a mediados de marzo se publicará un vídeo de la vuelta, probablemente, junto con más información sobre el coche en sí... así como con una posible actualización de mitad de ciclo para toda la gama Taycan.
Galería: Porsche Taycan de preproducción bate el récord de vuelta en Nürburgring
Aclarado este punto, se especula mucho sobre esta nueva berlina. Probablemente se llamará Taycan Turbo GT y se rumorea que contará con un tren motriz de tres motores, que rondará los 1.000 CV. Y la unidad adicional en el eje trasero no sólo permitirá una mejor gestión térmica, sino también adoptar técnicas avanzadas de control de tracción.
No está claro si se ha instalado una nueva batería en este modelo o si ya incluye alguna de las evoluciones presentadas en el futuro Macan 2024. Lo que está claro es que, sea lo que sea, le ha sentado fantásticamente bien.
Pero más allá del propio tiempo, lo que asusta es la regularidad que ha alcanzado el coche. A fin de cuentas, el piloto de desarrollo de Porsche, Lars Kern, consiguió dar varias vueltas casi calcadas. Lo que teniendo en cuenta la tortura que supone un circuito como este para un coche eléctrico, con sus 20,8 km de longitud, es algo digno de alabar.