El Rolls-Royce Phantom no es precisamente el primer coche que nos viene a la mente cuando pensamos en vehículos de altas prestaciones, pero sin duda no le falta potencia, gracias al poderoso motor V12 biturbo que esconde bajo su enorme capó.
Si bien nunca fue concebido como un coche con aspiraciones deportivas, el preparador Spofec ha querido dotar a la lujosa berlina británica de todavía más potencia y de una estética más imponente, gracias a una carrocería rebajada o nuevas llantas.
Galería: Spofec Rolls-Royce Phantom Series II
A nivel estético, lo más llamativo de este Rolls-Royce Phantom son las enormes llantas Spofec SP3, de 24 pulgadas de diámetro y en acabado pulido, que han sido desarrolladas junto al fabricante americano Vossen, responsable de la fabricación de las mismas mediante mecanizado CNC.
Las pequeñas aberturas de las llantas no son meramente estéticas, ya que permiten que llegue aire fresco al interior de las mismas para la refrigeración del equipo de frenos. Según Spofec, estas llantas son tremendamente resistentes y están disponibles también para la versión de batalla larga o Phantom EWB.
Las llantas en cuestión vienen calzadas con neumáticos en medidas 295/30 R24, mientras que la suspensión neumática de serie se ha modificado para rebajar la altura de la carrocería en 40 milímetros con respecto al Phantom de fábrica, aunque a partir de 140 km/h la suspensión vuelve al nivel original.
Desde luego, la mejora más importante de Spofec para el modelo la encontramos bajo el capó, ya que el bloque 6,75 litros V12 biturbo recibe un módulo de control electrónico que modifica la inyección y el encendido del motor, aumentando también la presión de soplado de los dos turbocompresores.
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El resultado es una potencia incrementada en 114 CV, para sumar un total de 685 CV a 5.400 rpm, frente a los 571 CV de serie. En términos de prestaciones, el Phantom de Spofec ahora despacha la aceleración de 0 a 100 km/h en 5,0 segundos, o bien 5,1 segundos en el caso de la versión de batalla larga, pero en ambos casos son tres décimas menos que de serie.
Por último, el preparador ofrece también un conjunto de modificaciones estéticas para el exterior de este Rolls-Royce, entre las que se incluyen cambios en el frontal, con un nuevo splitter que incrementa la carga aerodinámica, o un sutil spoiler sobre la tapa del maletero, por ejemplo.
Fuente: Spofec