Como bien sabrás, Lotus acaba de presentar el Eletre, su primer SUV eléctrico. Se trata de un modelo rompedor, no solo por ese motivo sino también por su diseño futurista y la tecnología que emplea. 

Por el momento, la única versión anunciada del modelo es la de 600 CV, pero podría estar acompañada por alternativas aún más potentes en los próximos años. Por si fuera poco bajar de los 3,0 segundos en la aceleración de 0 a 100 km/h...

Galería: Lotus Eletre 2023

Estos rumores de un Lotus Eletre de mayor potencia provienen de muchas fuentes y podrían tener algo de verdad. Hay que tener en cuenta que el Aston Martin DBX707, con 707 CV, o el Lamborghini Urus, con 650 CV, pesan bastante menos que el modelo de Hethel, al no tener que soportar una gran batería.

Por lo tanto, una opción más potente tendría todo el sentido, aunque también es cierto que el Eletre de 600 CV ya supera en la maniobra de 0 a 100 a sus rivales de combustión, pues el DBX7070 para el crono en 3,3 segundos y el Urus, en 3,6.

Entonces, lo más lógico es que el todocamino de Lotus quiera ir a por el récord del Tesla Model X Plaid, considerado el SUV más rápido del mercado, capaz de alcanzar los 100 km/h desde parado en tan solo 2,6 segundos. 

Desde luego, si se desarrolla un Lotus Eletre con 900 CV, estamos convencidos de que batirá esa plusmarca con facilidad... y no será fácil superarla. Por eso, los ingenieros de la marca británica podrían estar ideando un tren motriz con nada menos que tres motores eléctricos. 

De momento, debemos esperar acontecimientos porque primero tiene que llegar a comienzos de 2023 la variante de 600 CV, que se fabricará en China. Ya sabes que Lotus pertenece al gigante asiático Geely, de ahí su producción tan lejana. 

Por lo demás, cabe recordar que el Eletre disfruta de suspensión neumática con amortiguadores adaptativos (CDC), además de barras estabilizadoras activas, un sistema de reparto selectivo del par y tren trasero directriz. Todo, para que no solo sea un SUV muy potente sino también con un tacto emocional. 

Fuente: Top Gear