Uno de los 500 Lexus LFA producidos se está subastando en Bring a Trailer. Es el número 349, se encuentra en California y se trata de un Nürburgring Edition, una serie limitada a 64 unidades, 15 de ellas con especificaciones para el mercado de Estados Unidos, como nuestra protagonista.
El coche tan solo ha recorrido 2.000 millas, es decir, unos 3.200 kilómetros. Por supuesto, puedes pujar por él, pero en el momento de escribir este artículo, la mayor cifra casi supera los 1,5 millones de euros (1.620.000 dólares).
Elevado pedigrí
Producido de 2010 a 2012, no hay dos Lexus LFA iguales gracias a sus amplias opciones de personalización. En concreto, la estrella de esta subasta se vendió originalmente por 450.000 dólares.

Como puedes ver, el exterior es de color naranja, mientras que el interior va tapizado en Alcantara negro, mientras que las llantas de aleación son de 20 pulgadas y cuentan con neumáticos Michelin Pilot Super Sport 265/35 delante y 305/30 detrás, montados en febrero de 2022, que apenas se han utilizado.


Los asientos están calefactados, disponen de ajuste eléctrico (diez posiciones) y se tapizaron en Alcantara negro, el mismo material que se extiende por el salpicadero, los paneles de las puertas, el revestimiento del techo y en la consola central, aunque esta también va parcialmente en fibra de carbono.

Los airbags se sustituyeron tras la llamada a revisión de 2017 y no falta la placa que certifica el número de serie 349 del LFA.
Un sistema de sonido envolvente Mark Levinson de 12 altavoces, Bluetooth, reproductor de DVD/CD, controles de voz, climatizador automático y muchos más elementos, completan el equipamiento. Sin olvidarnos de un juego de maletas Tumi de fibra de carbono, una funda para el coche, un cargador de batería y los registros de las revisiones.


Obra maestra atemporal
El Lexus LFA es un coche único por derecho propio y ha pasado a la historia de los superdeportivos modernos en muchos sentidos. Construida con una carrocería de fibra de carbono y un chasis de polímero reforzado con carbono y aluminio, la variante Nürburgring añade splitter delantero también de carbono, alerón trasero fijo, suspensión rebajada en 10 milímetros y llantas específicas.


La potencia de frenado corre a cargo de pinzas monobloque Brembo, hechas de aluminio y pintadas en negro, con seis pistones delante y cuatro detrás, sobre discos carbocerámicos perforados de 15,4 pulgadas delante y 14,2 detrás.

El motor es el conocido bloque V10 atmosférico de 4,8 litros, desarrollado en colaboración con Yamaha, con válvulas y bielas de titanio, pistones forjados, lubricación por cárter seco y distribución variable VVT-i.
La potencia de esta serie limitada es de 570 CV, fuerza que se canaliza al tren trasero, que cuenta con la ayuda de un diferencial autoblocante. Por su parte, la caja de cambios es una secuencial automatizada Aisin de seis velocidades, aún más rápida en el LFA Nürburgring Edition.

Precisamente por estas cualidades técnicas, que siguen siendo de primer orden a pesar de la década transcurrida, el LFA es una sólida inversión para el coleccionista adinerado que consiga adquirirlo.
Fuente: BringATrailer.com