Si algunos coches pudieran hablar, contarían historias verdaderamente interesantes. Un claro ejemplo es este Lexus LFA, ya que la primera propietaria del superdeportivo no fue otra que Paris Hilton, bisnieta de Conrad Hilton, fundador de Hilton Hotels & Resorts. Ahora, ha salido a la venta en el concesionario Marshall Goldman, ubicado en Cleveland, Ohio, bastante lejos de la primera compra del coche, realizada en Los Ángeles.

Por si te interesa, o por simple curiosidad, el precio de adquisición es de 495.900 dólares, que equivale a más de 456.000 euros. Es un desembolso grande, pero estamos convencidos de que el coche merece la pena. No en vano, bajo nuestra humilde opinión, es el mejor Lexus jamás fabricado en la historia. 

Aparentemente, Hilton no solía emplear mucho el coche, porque el ordenador de a bordo muestra tan solo 4.000 millas, que equivalen a poco más de 6.400 kilómetros. Al fin y al cabo, darse paseos por Beverly Hills tampoco implicaba grandes desplazamientos...

Desde luego, el coche parece inmaculado, tanto por fuera como por dentro. El color de la carrocería se denomina Pearl White, mientras que en el volante se produce una interesante fusión de cuero blanco y azul. Las fotos hablan por sí solas del magnífico estado de conservación del vehículo. 

La compra del vehículo por parte de Hilton conllevó una historia realmente curiosa. En 2011, su exnovio le compró un LFA de color amarillo por su cumpleaños, pero la pareja rompió poco tiempo después. Parece ser que a Paris le gustó el coche y lo cambió por esta unidad ahora a la venta. 

El deportivo japonés estuvo en su garaje hasta el año 2014, cuando lo cambió por un McLaren 650S Spider. Pobre LFA...

Lexus fabricó 500 ejemplares del LFA entre 2010 y 2012. El motor es un glorioso bloque 4.8 V10, de aspiración atmosférica, que entrega 560 CV a 8.700 rpm y 480 Nm a 6.800 vueltas. Esta mecánica, que trabaja junto a un cambio automático de seis velocidades, generaba unas prestaciones fabulosas: 325 km/h de velocidad máxima y aceleración de 0 a 100 en 3,7 segundos. 

El chasis monocasco está fabricado en fibra de carbono y diversas partes de la carrocería también emplean este material ligero, de ahí que el peso en vacío esté por debajo de los 1.500 kilos. 

Si no has tenido suficiente con este LFA, aquí tienes otra galería de fotos de un ejemplar muy especial, perteneciente a la serie especial Nürburgring Edition, con 570 CV, firmado en el capó por Akio Toyota, presidente de Toyota Motor Corporation.