El año que acabamos de cerrar ha sido verdaderamente duro para la gran mayoría de fabricantes de automóviles, que se han visto afectados con problemas en la cadena de suministros y, sobre todo, por la escasez de chips que seguimos viviendo a nivel mundial.
Muchas de estas compañías se han visto obligadas a detener sus fábricas, y algunas han perdido cientos de miles de unidades en volumen anual de producción. Parece que los menos afectados han sido los fabricantes más pequeños, en concreto los de lujo.
Hace unos días, la firma británica Bentley anunciaba unas cifras de venta récord para 2021, y ahora es su principal rival, Rolls-Royce, la que ha declarado también un año histórico en lo que a entregas de vehículos se refiere.
De hecho, 2021 ha sido el ejercicio que más coches ha vendido la firma de Goodwood desde su fundación, hace 117 años, con nada menos que 5.586 ejemplares, que son pocos para cualquier marca de volumen, pero una barbaridad para una firma de superlujo como la de Goodwood.
Esta cifra supone, además, un incremento del 49% con respecto a las ventas del año 2020. La marca ha asegurado también que durante los últimos 12 meses ha conseguido números récord históricos en China, América y Asia Pacífico.
Si bien Rolls-Royce no ha dado demasiados detalles sobre las ventas por modelos, sí ha afirmado que tanto el Ghost como el Cullinan son responsables de este gran crecimiento. Además, el Phantom también está funcionando bien y la lista de pedidos está copada hasta el tercer trimestre de 2022.
Resulta interesante saber que el programa de vehículos usados de la compañía también ha conseguido unas ventas excepcionales, con una cifra nunca antes vista, aunque no se ha detallado. "Este ha sido un año verdaderamente histórico para Rolls-Royce Motor Cars", ha asegurado el CEO de la marca, Torsten Muller-Otvos.
La fábrica de la marca en Goodwood está actualmente cerca de su capacidad máxima, con dos turnos de trabajo diferentes. En total, Rolls-Royce cuenta con alrededor de 2.000 empleados en Reino Unido y en el resto del mundo.