El desarrollo de cualquier nuevo modelo de automóvil requiere una gran inversión y un largo periodo de tiempo, especialmente cuando hablamos de los buques insignia de las marcas, de lo más avanzados y cargados de tecnología.
En este caso queremos hablarte del Porsche 959, un icono de la segunda mitad de la década de los años 80, nacido para convertirse en un coche de rally del Grupo B, pero que finalmente llegó a la producción como un superdeportivo matriculable, para la calle.
Galería: Porsche 959 prototipo, en venta
Durante el proceso de desarrollo de este Porsche 959, el fabricante de Zuffenhausen produjo 12 prototipos de pruebas, conocidos como prototipos Serie F, que como es lógico fueron creados antes de las unidades de preproducción del coche.
Uno de estos ejemplares, en concreto el séptimo prototipo fabricado, está ahora a la venta. Es uno de los pocos que fueron pintados en color Rojo Rubí, y su carrocería tiene un aspecto prácticamente idéntico al de los modelos de serie que llegaron a los concesionarios. No obstante, carece de dirección asistida, retrovisor derecho o suspensión de altura ajustable, por ejemplo.



El coche en cuestión, cuyo precio estimado no se ha anunciado, se fabricó como un banco de pruebas para los sistemas eléctricos del vehículo y también para llevar a cabo test de conducción en climas con altas temperaturas. El modelo fue probado en la costa oeste de Estados Unidos y también en Europa.
Durante el tiempo que el prototipo sirvió como mula de pruebas para el fabricante de Stuttgart, el interior recibió diferentes configuraciones, incluida una con asientos diferentes a los del modelo definitivo. De hecho, todavía quedan muchos vestigios de su condición de prototipo, como cableado bajo los asientos que no encontrarías en el de producción.

Este prototipo que se pone a la venta en Alemania, a través de Mechatronik, es uno de los pocos supervivientes entre los Serie F, ya que Porsche destruyó la gran mayoría de prototipos de desarrollo del 959 antes de que el modelo llegara a la línea de producción.
Este ejemplar, con 26.520 kilómetros en el marcador, fue exportado a Estados Unidos en los años 80 y estuvo expuesto en las instalaciones de Vasek Polak, importador y vendedor de Porsche en el país norteamericano. El modelo también viajó a Japón, donde fue expuesto en diversas ocasiones, antes de ser vendido y acabar en Bélgica, para unos años después terminar en Reino Unido.
Fuente: Mechatronik