¡Pregunta! Nombre de coches con motor Wankel que recuerdes... No hay problema, seguro que recordarás los NSU Ro 80, Mazda RX-7 y RX-8 o el Mercedes-Benz C 111. ¿Pero un autobús con un pistón giratorio? Esa es la pregunta del millón. ¿La respuesta? Mazda Parkway Rotary 26.
Mazda comenzó a producir minibuses en 1960. El llamado 'Mazda Light Bus' estaba pensado como medio de transporte para pequeñas empresas, hoteles, escuelas y restaurantes. La primera versión también se utilizó como ambulancia, debido al diseño de las puertas traseras.
Galería: Mazda Parkway Rotary 26 (1974)
En el transcurso de los años siguientes, el 'autobús ligero' siguió desarrollándose y celebró su estreno en 1965, como un vehículo de 25 plazas para uso general en el transporte público. Ya un año antes, sorprendió al público en el salón de Tokio de 1964, con su diseño futurista, que llegó a la producción en serie.
Debido a la creciente demanda de minibuses, Mazda presentó en 1972 una versión completamente revisada, con un nuevo nombre: Mazda Parkway 26 (el número '26' informaba del número máximo de pasajeros).
Pero el Parkway tenía algo especial. Estaba construido con altos estándares de seguridad y mimaba a los pasajeros con una radio, un potente calefactor para los fríos días de invierno, así como con un revestimiento acolchado para el techo y otros elementos de alta calidad.

Hasta ese momento, todos los autobuses Mazda tenían un propulsor diésel o de gasolina. Pero, ¿cuándo (y sobre todo por qué) pensó Mazda en un autobús con motor rotativo?
En aquella época, la contaminación ambiental ya se estaba convirtiendo en un problema mundial. Así que en 1974 Mazda decidió ampliar la gama del Parkway para incluir una versión con un motor rotativo más ecológico.

El resultado fue el exclusivo Mazda Parkway Rotary 26. El motor rotativo 13B de bajas emisiones, conocido por el deportivo Mazda RX-3, superaba con creces la normativa japonesa sobre emisiones contaminantes y ofrecía una gran suavidad de funcionamiento.
Sin embargo, una buena potencia de 135 CV se encontró con un peso de unas 2,5 toneladas, por lo que no era posible superar los 120 km/h.
Aunque el minibús con motor rotativo se adelantó a su tiempo en términos de emisiones, su eficiencia de combustible dejaba mucho que desear. Además, cuando estaba equipado con el aire acondicionado opcional, se necesitaba otro motor alternativo de 1.000 cm3.
Junto con los dos depósitos de combustible de 70 litros, que eran necesarios debido al elevado consumo de combustible del motor rotativo, el peso del vehículo aumentó en unos 400 kilogramos, lo que incrementó todavía más el gasto de carburante.
Los elevados costes de funcionamiento hicieron que solo se fabricase un número muy reducido de unidades, ya que las pequeñas empresas no podían permitirse el Parkway con motor rotativo, por lo que salieron de las líneas de montaje solo 44 ejemplares hasta 1976. Esto lo convierte en uno de los vehículos más raros con motor rotativo y sigue siendo una curiosa excepción en la historia de los vehículos de Mazda.
Aunque el Parkway Rotary es extremadamente raro, ya que solo se fabricaron 44 ejemplares, la familia Frey de Augsburgo consiguió adquirir una versión del autobús con motor rotativo para su Museo Mazda Classic.
Sin embargo, la historia que hay detrás es bastante aventurera: "Un amigo de un amigo conocía a alguien en Japón que tenía un ejemplar en venta", recuerda Joachim Frey.
"Así que sin más preámbulos nos pusimos en contacto con el concesionario y compramos el autobús. No teníamos ni idea de las sorpresas que nos esperaban. El autobús fue enviado al puerto de Rotterdam, donde finalmente recibimos el raro vehículo. Por supuesto, hubo que hacer varios trabajos en él, pero a pesar de ello pudo ponerse en marcha enseguida y lo llevamos a Augsburgo sin incidencias".