El pasado mes de mayo anunciamos la salida a subasta de un monoplaza de Fórmula 1 muy especial, pilotado en su día por Lewis Hamilton, siete veces campeón del mundo de F1, y hoy podemos decirte que el coche ha sido vendido recientemente por una cifra casi de récord.

Inicialmente la casa de subastas RM Sotheby's, que es quien lo ha vendido, estimaba un precio final de entre 4 y 6 millones de euros, y la cifra exacta ha quedado en la parte alta de dicha horquilla. Alguien ha pagado nada menos que 5,6 millones por el monoplaza de Hamilton.

Si bien no se trata del Fórmula 1 más caro de todos los tiempos, con semejante importe se coloca en segundo lugar en el ranking, solo por detrás del Ferrari F2001 de Michael Schumacher, que fue vendido en 2017 por la friolera de 6,3 millones de euros, también en una subasta de RM Sotheby's.

Galería: McLaren MP4-25A de Lewis Hamilton (2010)

El coche en cuestión, un McLaren MP4-25A del año 2010, es con el que el piloto británico consiguió la victoria en el Gran Premio de Turquía de aquel mismo año, aunque en el campeonato terminó cuarto. Cabe recordar que Hamilton inició su carrera en la F1 en 2007, por lo que fue uno de sus primeros monoplazas.

"Los logros de Sir Lewis Hamilton en el deporte son tan destacables que puede que nunca sean batidos, por lo que los coches a los que ha estado ligado podrían ser los más preciados en las próximas décadas", ha afirmado Shelby Myers, especialista de RM Sotheby's.

El coche equipa un V8 atmosférico Mercedes-Benz FO 108X, de 2,4 litros, con una potencia de alrededor de 750 CV, y dado que el coche ha pertenecido al departamento histórico de McLaren, está en perfecto estado y se puede pilotar en circuito.

La subasta se llevó a cabo el fin de semana pasado, con motivo del Gran Premio de Gran Bretaña 2021 de Fórmula 1, en el circuito de Silverstone, donde se reunieron más de 140.000 aficionados a la categoría reina para ver la carrera de su héroe nacional.

De hecho, dichos aficionados tuvieron la ocasión de ver y escuchar el V8 de este McLaren MP4-25A de 2010, ya que McLaren puso el coche a punto y llevó a cabo una exhibición en el propio trazado de Silverstone, con el piloto Rob Garofall al volante, para regocijo de los amantes de los Fórmula 1 de antaño.