Una carrera de aceleración es la mejor prueba para comparar el rendimiento de dos coches. Lo común es ver este tipo de pruebas entre vehículos semejantes, pero esta es una ocasión especial. Un Tesla Model S eléctrico contra un Benetton de Fórmula 1 con motor V10.

A priori, el coche estadounidense debe hacer una mejor salida, puesto que entrega todo el par desde el momento en el que se pisa el acelerador, un total de 950 Nm, a los que hay que sumar 680 CV (500 kW). 

Fórmula 1 vs. Tesla Model S

No obstante, el Benetton B197 que pilotaron Gerhard Berger, Jean Alesi y Alexander Wurz durante la temporada 1997 posee un motor V10 atmosférico de 3,0 litros y origen Renault, que entrega alrededor de 780 CV (574 kW) y 520 Nm de par máximo, y va asociado a un cambio secuencial de seis marchas.

Con este coche, el piloto austriaco ganó el Gran Premio de Alemania de 1997 en el circuito de Hockenheim y la escudería de Enstone logró ocho podios y la tercera posición en el mundial de constructores, con 67 puntos.

Presentados los protagonistas, toca ponerlos a prueba. La carrera consiste en una tradicional 'drag race' y el Tesla Model S parte con ventaja, pues el Benetton tendrá los neumáticos fríos, algo vital en los coches de competición.

Con el paso de los metros, el Fórmula 1 recorta distancias hasta superar al vehículo eléctrico. De esta forma se aprecia la potencia del V10, que bate al Tesla una vez acaba el periodo donde lo importante es la aceleración y la velocidad punta pasa a un primer plano.

Fórmula 1 vs. Tesla Model S

En el momento de parar, el B197 vuelve a demostrar de qué están hechos sus frenos, y hace aún más notable la diferencia entre un coche de competición y uno de calle. Sin embargo, el Tesla sí gana al Fórmula 1 en la aceleración hasta las 40 millas por hora (64 km/h), debido a los problemas de tracción iniciales del monoplaza.

La siguiente medición llega a las 100 millas por hora (161 km/h) y su frenada hasta volver a parar. El Benetton alcanza dicha velocidad y su potencia de frenado hace el resto. El coche de competición gana sin despeinarse al Tesla Model S en esta prueba.

Tras esa victoria del B197, ambos se someten a un slalom entre unos conos para comprobar su maniobrabilidad. De nuevo, el Fórmula 1 supera al eléctrico y se alza como ganador en este particular duelo.

Galería: Fórmula 1 vs. Tesla Model S

Fuente: Driven