En la actualidad, el mundo del automóvil está dominado por todocaminos de todos los tamaños y diseños. Con el paso del tiempo, las normativas de seguridad, cada vez más estrictas, han 'obligado' al mercado a ofrecer modelos más grandes y seguros, aunque eso no siempre fue así.
Hace sesenta años, F.M.R. comercializaba el TG 500, uno de los microcoches más rápidos de la historia. Su peculiar y compacto diseño lo convertía en una atracción, incluso en la actualidad. Si estás interesado en este tipo de coches, puede que estés de suerte, puesto que se subasta un ejemplar... aunque no va a ser barato.
Galería: F.M.R. TG 500 'Tiger'
El TG 500, apodado como el 'Tigre', fue la culminación de años de producción de microcoches antes de que la empresa F.M.R. introdujera este ágil microcar. Su base era el monocasco Messerschmitt KR 200 (un microcoche de tres ruedas del antiguo fabricante de aviones), aunque F.M.R. añadió una cuarta rueda para mejorar la estabilidad.
Aprovechando la ocasión, la empresa también incorporó frenos más grandes, faros y pilotos traseros de mayor tamaño, además de brazos de suspensión delanteros más resistentes. Sin embargo, la adopción de un motor más potente eclipsaba el resto de modificaciones del vehículo.
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El término "más rápido" es bastante relativo cuando hablamos de microcoches, ya que este modelo mejorado necesitaba mucho tiempo en alcanzar las 60 millas por hora (96 kilómetros por hora). Concretamente, tardaba 28 segundos, aunque su velocidad máxima era de unas impresionantes 78 mph (125 km/h).
El motor de dos tiempos, con 494 cm3 y dos cilindros, desarrollaba la 'friolera' de 20,5 CV. Lógicamente es una cifra irrisoria, si la comparamos con los vehículos actuales, pero en su época era más que suficiente para un microcoche. Asimismo, F.M.R. añadió una caja de cambios manual de cuatro velocidades con marcha atrás.
Sabemos que el Tiger dispone de dos plazas, ventanillas de corredera y el techo de burbuja de cristal, como si de una 'quesera' se tratase. También tiene peculiaridades, como el volante con diseño de avión y la baca exterior sobre el maletero, que parece ideal para llevar una sola maleta.
El coche está a la venta a través de RM Sotheby's, que estima que el TG 500 valdrá entre 100.000 y 135.000 euros. Son cantidades muy significativas para un coche tan pequeño, pero también es muy raro y exclusivo. La casa de subastas cree que se trata de uno de los 150 supervivientes conocidos, lo que puede, incluso, aumentar su precio de venta definitivo.
Fuente: RM Sotheby's