La quinta generación del compacto alemán por excelencia, el Volkswagen Golf, se lanzó al mercado en el año 2003, y es la que dio origen a la gama más amplia de la historia de la marca, con modelos como el Golf Plus y derivados como el Scirocco, el Tiguan o el Touran, además del descapotable Eos. Lo que nunca llegó a producción fue un roadster deportivo.

De hecho, en el salón del automóvil de Frankfurt del año 2003, el gigante alemán presentó este Volkswagen Concept R, un modelo también derivado del Golf, con un diseño agresivo y una propuesta mecánica muy interesante, siguiendo la filosofía 'todo atrás'.

El modelo medía 4,16 metros de largo (algo menos que un Audi TT actual, con 4,19 metros), 1,78 metros de ancho y 1,25 metros de alto, y gozaba de proporciones de deportivo puro. El diseño, elegante y de líneas tensas, lo firmaron Murat Günak y Peter Schreyer. En este caso, el coche se pintó en un color gris azulado, denominado Frozen Sky.

A nivel estético, lucía un frontal acorde a los modelos de la época, con listones cromados, una gran calandra inferior o grupos ópticos LED, mientras que en la vista lateral destacaba por unos musculosos pasos de rueda que escondían llantas de aleación de 19 pulgadas, en diseño de cinco radios, con neumáticos en medida 255/40. 

Volkswagen Concept R (2003)

En la zaga también encontramos pilotos LED, que recuerdan ligeramente a los del Eos, además de dos jorobas tras los asientos o salidas de escape dobles en posición central. Ya en el habitáculo, contaba con tapicería de cuero en color Tierra Oscura y múltiples elementos cromados, y quizá lo más sorprendente es que los asientos de espuma estaban fijos, y lo que se ajustaba era toda la estructura del volante y los pedales.

El corazón del modelo era el motor de gasolina V6 de 3,2 litros del Golf R32, en este caso en posición central, con propulsión trasera y asociado a una caja de cambios automática DSG, de doble embrague y seis velocidades. Ofrecía 265 CV de potencia y un par motor máximo de 350 Nm.

Volkswagen Concept R (2003)
Volkswagen Concept R (2003)
Volkswagen Concept R (2003)

Gracias a estas cifras, el prototipo roadster anunciaba una aceleración de 0 a 100 km/h en apenas 5,3 segundos y una velocidad máxima teórica de 270 km/h, aunque Volkswagen aseguró que la velocidad real estaba limitada de forma electrónica a 250 km/h.

Desafortunadamente, el Volkswagen Concept R se quedó en un mero ejercicio de diseño por parte de la marca alemana, y aunque hubo intentos posteriores de lanzar un deportivo biplaza, el proyecto no llegó a materializarse, y hay quien dice que Volkswagen podría revivir esta idea dentro de la familia ID, con un sistema de propulsión 100% eléctrico.