Presentado hace justamente un año como el nuevo 'Longtail' de la gama de Woking, el McLaren 765LT es uno de los coches más rápidos y espectaculares del mercado, capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos y de 0 a 200 km/h en apenas 7,2 segundos, que se dice pronto.

¿De verdad hace falta un coche todavía más rápido? El preparador texano Hennessey Performance cree que sí, por lo que acaba de presentar un paquete de modificaciones para el superdeportivo británico, que catapulta la potencia del motor de ocho cilindros.

De serie, el bloque V8 biturbo de 4,0 litros del 765LT ofrece 765 CV a 7.500 rpm y un par motor máximo de 800 Nm a 5.500 vueltas, pero tras pasar por las manos de la firma de John Hennessey, el motor alcanza los 1.014 CV, nada menos.

Gracias a esta mejora, anunciada la semana pasada por la compañía, el McLaren 765LT es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en poco más de 2,0 segundos (2,1 en el 0-96 km/h) y alcanzar una velocidad máxima cercana a los 350 km/h, frente a los 330 km/h del modelo de serie.

Hennessey McLaren 765LT
Hennessey McLaren 765LT
Hennessey McLaren 765LT

"El nuevo 765LT está subestimado de fábrica", afirma John Hennessey. "Lo probamos en nuestro banco y ofreció 776 CV a las ruedas, lo que significa que produce unos 877 CV reales. Aumentar la potencia a más de 1.000 CV reduce la aceleración de 0 a 96 km/h a solo 2,1 segundos, lo que es una locura".

Como es habitual, el paquete de modificaciones de Hennessey incluye diversas mejoras, como filtros de aire de altas prestaciones, un tramo recto o 'downpipe' de acero inoxidable para el sistema de escape, que hace al coche todavía más ruidoso, o los cambios en la gestión electrónica del V8.

Hennessey McLaren 765LT

A nivel estético, el 765LT se mantiene estrictamente de serie, aunque también puede incorporar algunos sutiles elementos diferenciadores, como el emblema exterior Hennessey, los distintivos HPE1000 o una placa conmemorativa para el interior, con el número de unidad.

Si te estás preguntando cuánto cuesta semejante preparación, el kit y la instalación suponen un desembolso de 24.950 dólares (unos 21.000 euros), que habría que sumar al precio del coche, cifrado en alrededor de 300.000 euros.