A principios de mes, el fabricante británico Rolls-Royce presentó la segunda generación de su modelo de acceso, el Rolls-Royce Ghost 2020, que también resulta ser la berlina más exitosa de la historia de la firma de Goodwood. Ahora, no obstante, ya podemos ver la variante de batalla larga o 'Extended', que ofrece todavía más espacio para los ocupantes traseros.
Mientras que el Ghost convencional mide 5,55 metros de largo, este 'Extended' suma otros 170 milímetros a la distancia entre ejes, para un total de 5,72 metros. Según la marca, solo el Phantom Extended, también de batalla larga, puede ofrecer una habitabilidad trasera similar, al menos entre las berlinas de cuatro puertas.
Rolls-Royce ha querido mantener la elegancia y las atemporales líneas de la variante convencional del Ghost, de manera que solo ha alargado las puertas traseras y algunos paneles de carrocería de las inmediaciones de las puertas.
Como en la mayoría de berlinas de batalla larga, lo realmente interesante lo encontramos en el habitáculo, ya que ahora el espacio disponible es todavía más grande. En este caso, hay disponible por primera vez un asiento reclinable 'Serenity', y la marca asegura que ofrece una comodidad similar a la de un jet privado de lujo.
Siguiendo la norma habitual, entre los asientos traseros encontramos una consola que cuenta, por ejemplo, con una nevera, por si necesitas viajar acompañado de una botella de champán bien fresquita. Y decimos champán porque, efectivamente, esta nevera está desarrollada junto a Master Sommelier y tiene dos modos de funcionamiento, en función del tipo de champán a guardar.
Bajo el capó se mantiene el mismo motor 6,75 litros V12 biturbo del Ghost normal, con 571 CV de potencia y 850 Nm de par motor máximo, asociado a un cambio automático de ocho velocidades, tracción total y un eje trasero direccional.
Además, el Ghost Extended incorpora un sinfín de tecnologías, convirtiéndose, de hecho, en el modelo más avanzado de la historia de la marca. Incluye faros láser con un alcance de 600 metros, Head-up Display, un sofisticado sistema de filtración de aire, función de aparcamiento automático, etc...
También es de nuevo desarrollo la suspensión Magic Carpet Ride, neumática y autonivelante, con amortiguadores de dureza variable. De momento no conocemos el precio del modelo, pero debería rondar los 300.000 euros en el Viejo Continente.
Fuente: Rolls-Royce