De cara a reemplazar al veterano Frégate, un sedán de lujo que llevaba una década a la venta, la firma francesa manejó varias ideas. Alguna, incluso, rozando lo descabellado, como demuestra el Renault Concept 900.
Diseñado por el ingeniero Fernand Picard, su idea fue tratar de optimizar el espacio disponible, convirtiéndolo en un curioso vehículo familiar.



Nombre: Renault Concept 900
Presentación: 1959
¿Qué lo hace especial? Literalmente, se trata de un automóvil pensado al revés, propulsado por un motor V8.
Reconocido amante de los coches de propulsión, Fernand Picard quería volver al concepto del Dauphine, diseñado tres años antes. Al hacerlo, el ingeniero colocó el vano motor en la parte trasera, donde se ubicó un propulsor V8, de 1,7 litros de cilindrada y 80 CV, con un carburador de doble cuerpo Solex o Weber, en función del prototipo del que hablemos.
Porque sí, se desarrollaron dos modelos diferentes, en el que el motor se colocaba de distinto modo: en el voladizo trasero o detrás de los asientos posteriores, justo por encima de la caja de cambios.

Un concept único, una plataforma única
A pesar de la influencia del Dauphine, el chasis se creó específicamente para este ejercicio de estilo. Respecto a las líneas de la carrocería, inicialmente, existieron dos proyectos: uno creado por Ghia, en Turín, y otro obra del diseñador francés André Daniel. Más adelante, se exploró una tercera vía, creada por Robert Barthaud, de inspiración 'fastback' y con una luna trasera mucho más inclinada.

Innovador en muchos sentidos, el empleo de materiales ligeros le permitía declarar menos de 1.000 kilos en su paso por la báscula. También, contaba con una columna de dirección móvil, lo que permitía al conductor acceder con mayor comodidad al habitáculo.
¿Problemas? Durante la fase de desarrollo, llevada a cabo en el centro de pruebas Lardy, el Renault Concept 900 nunca llegó a mostrarse seguro; principalmente, porque los asientos delanteros iban ubicados directamente sobre el eje.
Dejado de lado, nunca pasó de la fase de prototipo y acabó cediendo el paso al Renault Estafette, el primer monovolúmen-comercial de la firma.
Fotos: Emmanuel Touzot / Motor1.com / Renault Comunicación / Bernard Asset