El Peugeot 205 T16 demuestra que las reglas están hechas para saltárselas, al menos, de vez en cuando. La legendaria categoría del Grupo B de rallyes era famosa porque las reglas no existían, salvo porque los fabricantes debían construir 200 unidades de un coche de calle, para poder homologar el modelo de competición.

Así nacieron algunos de los coches más legendarios de los ochenta, como el Peugeot 205 T16 que nos ocupa. Un automóvil nacido en 1984 que, al ser el Peugeot de calle más radical que se ha construido hasta la fecha, le ha valido para convertirse en un coche clásico legendario.

Peugeot 205 T16, más información:

Peugeot 205 T16 1984
 
Peugeot 205 T16 1984
 
Peugeot 205 T16 1984

Peugeot 205 T16: un GTI a lo bestia

Aunque para desarrollarlo se tomó como base el Peugeot 205 GTI, su diseño tiene poco que ver con el modelo original. De hecho, puede parecer que el T16 tiene el aspecto propio de un 205 con una sobredosis de gimnasio, pero ese aspecto es fruto de la necesidad.

Los encargados de desarrollar esta versión fueron los especialistas de Heuliez, quienes al recibir el coche, cortaban la parte posterior e introducían un subchasis tubular, al que se anclaban la suspensión trasera y el motor. Por otro lado, se hacía necesario algo de espacio extra para alojar el sistema de tracción total. De ahí los pronunciados ensanchamientos de la carrocería.  

En cuanto al color, todos los Peugeot 205 T16 que se fabricaron eran grises, salvo cuatro unidades de color blanco, tremendamente valoradas entre los coleccionistas.

Se trata de los cuatro coches que se entregaron a los personajes más ilustres de la marca en los años 80: Jean Boillot, responsable del lanzamiento del Peugeot 205; el piloto Didier Pironi, André de Cortanze, Director Técnico de Peugeot Sport de 1984 a 1992, y Jean Todt, director de Peugeot Sport entre 1982 y 1993, a quien se le ocurrió pintar estas cuatro unidades de blanco.  

Peugeot 205 GTI, más información:

Peugeot 205 T16 1984

Peugeot 205 T16: ¿un bloque diésel?

Para impulsarse, el Peugeot 205 T16 recurría a un motor turboalimentado de gasolina 1.8 de cuatro cilindros, procedente del 205 diésel, al que se le acopló una nueva culata de 16 válvulas y un turbocompresor Garret. El resultado fue que un utilitario de calle, con 200 CV de potencia y 255 Nm de par máximo. En la época, eran cifras fuera de lo común.

Las prestaciones eran espectaculares: aceleraba de 0 a 100 km/h en 6,6 segundos y alcanzaba 210 km/h. Por su parte, el motor se mostraba tremendamente contundente a partir de 3.000 rpm. Como muestra de su brutalidad, baste decir que aceleraba más rápido que el Ferrari 308 GTB que se comercializaba en aquel entonces. 

Peugeot 205 T16 1984
Peugeot 205 T16 1984

Palmarés en competición

El Peugeot 205 T16 fue uno de los coches de rallies más exitosos del Grupo B, hasta la disolución de la categoría en 1987. Sin embargo, su recorrido no terminó ahí: en manos de Ari Vatanen ganó el Dakar en 1987, 1989 y 1990; además, obtuvo un segundo puesto en la subida a Pikes Peak... que hubiera sido un primer puesto de no ser por los problemas de motor. 

Más información sobre coches clásicos: