Con las adivinanzas tan sencillas que proponemos, seguramente, ya sepas de qué todocamino estamos hablando. Efectivamente, el protagonista de nuestra próxima prueba es el Audi Q5 2017. Un SUV que, tras su última puesta al día, nada tiene que ver con el modelo precedente. Sin duda, en Audi se han tomado el cambio de generación muy en serio...
Además de una imagen ligeramente renovada, que mejora el coeficiente aerodinámico (Cx) del conjunto, el Audi Q5 2017 también estrena plataforma. Y, aunque sea algo que escape al alcance del ojo humano, este cambio tiene una importancia capital; sobre todo, al hablar de dinámica de conducción.

Un todocamino preparado para todo
Aunque su hábitat natural sea el asfalto, una seña de identidad que comparte con la mayoría de SUV actuales, el Audi Q5 2017 cuenta con algún que otro aliado a su favor... si hay que abandonar la carretera. Estoy hablando, por ejemplo, de la suspensión neumática adaptativa. O, sin ir más lejos, de la inclusión de un modo específico para su uso off-road, dentro del control dinámico de la conducción Audi drive select.
Audi Q5 2017, con 190 CV de potencia
Si levantamos la tapa del capó, descubriremos que nuestra unidad del Audi Q5 2017 recurre al motor turbodiésel 2.0 TDI, con 190 CV de potencia y 400 Nm de par entre 1.750 y 3.000 rpm. Datos que le permiten colocarse como la opción más poderosa de la gama de mecánicas de gasóleo. A su lado, encontramos la transmisión automática de doble embrague S tronic, de 7 relaciones, y el sistema de tracción total quattro ultra.
Con un consumo medio oficial de 4,9 litros cada 100 kilómetros, también declara unas prestaciones interesantes, con 218 km/h de velocidad máxima y 7,9 segundos en la prueba de aceleración de 0 a 100. ¿Te ha picado la curiosidad? En unos días podrás disfrutar de la prueba al completo...
