Potenciado por la importancia de disponer del distintivo 0 de la DGT en las grandes ciudades, el MINI Countryman Cooper SE ALL4 de esta prueba, o lo que es lo mismo, el SUV híbrido enchufable de MINI, se ha convertido en uno de los pilares de ventas de la marca del Grupo BMW.
Sin duda, al hablar del Countryman, lo hacemos del modelo más práctico y polifacético de la siempre jovial gama del fabricante británico, que en esta ocasión, pasa por nuestra sección 'Guía de compra' para demostrar hasta qué punto es interesante esta versión electrificada (PHEV).
El MINI Countryman Cooper SE, en cinco puntos clave:
Galería: Prueba MINI Countryman Cooper SE ALL4
Diseño
Lanzado en 2016 y actualizado hace relativamente poco por la vía del restyling, seguramente, hablemos de la versión más 'seria' de la gama Countryman, lo que no significa que este todocamino compacto no luzca un aspecto típicamente MINI. Además, sigue ofreciendo múltiples opciones de personalización.
Dicho esto, nos encontramos ante un SUV de 4,32 metros de largo, 1,82 de ancho y 1,56 de alto, que ofrece más espacio y más maletero que ningún otro modelo de la marca, por lo que resulta ideal tanto para las tareas del día a día como para echarse a la carretera con él.

Interior
Tras el restyling, en el interior se aprecian nuevos acabados y materiales, así como la novedosa instrumentación digital, de 5,0 pulgadas, que resulta similar a la que estrenó el MINI Cooper SE eléctrico. La segunda gran pantalla, la del sistema multimedia, es táctil y mide 8,8 pulgadas.
En términos de espacio, las plazas traseras son buenas para dos adultos en todas sus cotas, aunque es cierto que en esta versión PHEV los asientos están un poco más elevados y cuenta con una baqueta fija (en las versiones térmicas, se puede deslizar longitudinalmente). Respecto al maletero, también ve reducida su capacidad, pasando de 450 a 405 litros, que se transforman en 1.275, si se abaten los asientos.



Mecánica
Si nos centramos en la variante híbrida enchufable, el Cooper SE Countryman ALL4 sigue empleando el misma esquema electrificado, sustentado en el mencionado motor turboalimentado de gasolina, con tres cilindros y 1,5 litros, y en una unidad eléctrica, que se encarga de accionar el eje trasero, asegurando la tracción total.
Por lo demás, la transmisión automática con convertidor de par Steptronic, de seis relaciones, se encarga de gestionar los 220 CV de potencia combinada, mientras que una batería de 9,6 kWh de capacidad, asegura hasta 57 kilómetros de autonomía libre de emisiones.

En marcha
Al volante, el MINI Countryman híbrido enchufable pierde parte del ADN dinámico de los MINI más pequeños, debido a su gran tamaño y a los 1.715 kilos de peso que anuncia en vacío. Aun así, sigue siendo un modelo confortable y, hasta cierto punto, bastante eficaz sobre todos los terrenos. Y si no nos crees, echa un vistazo al eco-rally que corrimos con él.
Aun así, cabe destacar su buen hacer eléctrico en ciudad, así como la sensación de aceleración que aporta la parte eléctrica fuera de ella. También, los modos de conducción, ya que además de disponer de un mando que fuerza al coche a funcionar en modo eléctrico, el conductor también puede escoger entre los programas Sport, Green y Normal.
Por su parte, el consumo medio homologado es 1,7 litros cada 100 kilómetros, una cifra difícil de conseguir con la batería llena y que, cuando se descarga, es normal ver ascender hasta el entorno de los 5,0-5,5 l/100 km.

Equipamiento y precio
Actualmente, MINI ofrece cuatro acabados para este modelo: Essential, Classic, MINI Yours y MINI Untamed Edition, que podría calificarse como la sustituta de la Northwood Edition de nuestra unidad de pruebas.
Sobre los precios, parten de los 42.900 euros, sin contar con las ayudas gubernamentales del Plan MOVES III, y van subiendo con cada uno de los acabados, a la vez que lo hace el equipamiento de serie. Por eso mismo, si estás interesado en el modelo, lo mejor será que te pases por la web oficial del fabricante y eches un vistazo a la oferta comercial en el configurador.