En esta vida, no todo tiene que guiarse bajo el criterio de la razón. También hay ciertos momentos en los que, por qué no, nos podemos dejar llevar por la pasión, incluso en algo tan importante como decidir nuestro coche para los próximos años. 

El Audi Q3 Sportback representa esa parte emotiva frente al Q3 convencional, más espacioso pero menos impactante visualmente hablando. No sé tú, pero yo, en los últimos meses, me suelo cruzar con bastantes más ejemplares del todocamino de corte coupé que de su hermano estándar, síntoma de que la gente valora mucho lucir su coche.  

Galería: Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic

Eso sí, una cosa es que nos guste que nos miren y otra muy diferente, tener que estar limitando nuestros kilómetros mensuales y anuales porque el consumo del coche es demasiado elevado.

Para todos aquellos que persiguen gastos bajos de carburante, el bloque turbodiésel 2.0 TDI de 150 CV representa la elección perfecta. Y si lo asocias a la transmisión automática de doble embrague S tronic, con siete velocidades, obtendrás un gran agrado de conducción en todos los escenarios. 

Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic
Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic

Nuestra unidad de pruebas se conforma con la tracción delantera, que es la opción más habitual y lógica, salvo que te muevas habitualmente por zonas frías o busques ese plus de motricidad que otorga la tracción quattro (mediante embrague Haldex) en una conducción exigente. 

Si te gusta el color Negro Mito Metalizado y las llantas Audi Sport de 20 pulgadas que luce nuestro coche, debes saber que cuestan 1.015 y 1.035 euros, respectivamente. También por los cristales traseros oscurecidos hay que pasar por caja: 515 euros. Y por las inserciones en color negro brillante, hay que desembolsar 710 euros. En cambio, los faros LED vienen de serie. 

Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic
Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic

Por su parte, el diseño del interior recuerda al del pequeño A1 Sportback, con una pantalla central de hasta 10,1 pulgadas (paquete Connectivity: 685 euros) ligeramente orientada hacia el conductor y la instrumentación digital Audi virtual cockpit con 10,25 pulgadas, también dentro de ese pack mencionado. 

Los mandos de la climatización automática bizona son diales giratorios, muy fáciles de usar, y para gobernar el monitor central y todos los submenús, tenemos que apuntar bien con el dedo para dar en el icono que queremos, algo que genera más distracciones de la cuenta. El volante achatado por la parte inferior viene de serie, pero también se puede escoger otro con el mismo diseño y el aro completo sin sobreprecio.

Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic
Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic
Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic

Volvemos al campo de la pasión al hablar de la habitabilidad trasera, considerablemente menor que en el Q3. Al fin y al cabo, el diseño toma más importancia y eso resta espacio, hasta el punto de que las personas altas solo son bienvenidas en las plazas delanteras. Como contrapunto, se mantienen la regulación longitudinal de la banqueta trasera, con 13 centímetros en total, y la inclinación variable del respaldo. 

Piensas que el maletero también va a ser más pequeño, ¿verdad? Pues nada de eso, porque ofrece 530 litros, como el del Q3. Si se abaten los asientos (proporción 40:20:40), la cifra resultante es de 1.400 litros, algo menos que su 'hermano', por motivos de diseño. 

Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic
Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic

Pasando a la parte mecánica, el motor 2.0 TDI de 150 CV es lo mínimo que se puede pedir en un coche de este tipo, con 1.580 kilos de peso en vacío. Gracias a su buen par en la zona baja del cuentavueltas y a que la potencia máxima se despliega a tan solo 3.000 rpm, no hay que apurar las marchas a la hora de ganar velocidad o para adelantamiento normales.

Las prestaciones (9,3 segundos en el 0 a 100 y 205 km/h) demuestran que se puede viajar habitualmente con varias personas y con una dosis de fuerza más que suficiente. Además, el propulsor está bastante bien aislado y no resulta especialmente áspero, aunque lógicamente no llega ni mucho menos al nivel de suavidad de un bloque de gasolina TSI.

Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic

Esta versión homologa 5,7 litros cada 100 kilómetros y, durante la prueba, hemos fijado un consumo de 6,4 litros, nada desproporcionada, más aún con los 'rodillos' de 255 milímetros de anchura, que no eran precisamente una solución de baja resistencia a la rodadura. 

Cabe recordar que la caja S tronic dispone de gestión deportiva (modo S) y levas tras el volante, con el fin de adaptarse perfectamente a todos los gustos y a cualquier conducción. 

Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic

El Audi Q3 Sportback no es solo una 'cara bonita', sino que la marca alemana lo ha puesto a punto aderezando un poquito de pimienta, a través de la dirección progresiva (de desmultiplicación variable) y la suspensión deportiva de serie. Opcionalmente, hay amortiguadores adaptativos por 985 euros, pero no contábamos con ellos en el coche. 

Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic

Por lo tanto, lo hemos probado tal cual llega de fábrica, salvo por los neumáticos más anchos, y he de decir que este SUV genera diversión en las curvas porque balancea poco y presenta un guiado bastante convincente. Quizá el CUPRA Formentor tiene un tren delantero más incisivo, sobre todo en trayectorias más cerradas, pero el tacto entre ambos es bastante cercano. Respecto al BMW X2, el feeling deportivo es más acusado en este último.

Por lo demás, el Q3 Sportback lidia muy bien con curvas concatenadas, que siempre es una prueba de fuego para un coche con más altura que un turismo, pues presenta un centro de gravedad más elevado. 

El Audi drive select es de serie y presenta los programas efficiency, comfort, auto, dynamic e individual. En este último se pueden modificar la respuesta del motor y la asistencia de la dirección entre tres configuraciones. Ninguna de ellas es extrema, aunque sí aparecen diferencias al compararlas. 

Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic
Prueba Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic

En el apartado comercial, he decirte que, comparando versiones semejantes, el Q3 Sportback es ligeramente más caro que el Q3. En este caso, hay que abonar 48.370 euros más todos los extras que quieras añadir. Por cierto, esta variante no lleva la etiqueta Eco, sino la C, ya que no incluye ningún aporte eléctrico.

Si no vas a recorrer muchos kilómetros al año, quizá el motor de gasolina 1.5 TSI de 150 CV con la caja S tronic sea la combinación más adecuada, pero curiosamente cuesta más: 49.210 euros. En fin, dejarse llevar por la pasión no es incompatible con echar alguna que otra cuenta antes de decidirse...  

Audi Q3 Sportback S line 35 TDI S tronic

Motor Diésel, 4 cilindros en línea, turboalimentado, 1.968 cm³
Potencia 150 CV entre 3.000 y 4.200 rpm
Par máximo 340 Nm entre 1.750 y 3.000 rpm
Caja de cambios Automática de doble embrague S tronic, 7 velocidades
0-100 km/h 9,3 s
Velocidad máxima 205 km/h
Consumo 5,7 l/100 km
Tracción Delantera
Longitud 4,50 m
Anchura 1,84 m
Altura 1,56 m
Peso en vacío 1.580 kg
Número de asientos 5
Capacidad del maletero 530 l
Precio base 48.370 euros