El camino hacia la electrificación de los vehículos ya ha comenzado y es imparable. Mientras que algunos fabricantes dan sus primeros pasos en ese escenario, otros, como es el caso de Hyundai, tienen los deberes hechos, desde hace algún tiempo.
Un buen ejemplo de ello es el nuevo Hyundai IONIQ 2019 que, desde 2016, fecha en que comenzó su comercialización, ya ha vendido 10.700 IONIQ híbridos, 800 híbridos enchufables y 400 100% eléctricos. Todo un éxito, que le ha llevado a ser el tercer fabricante que más crece en el campo de los vehículos electrificados.
Durante una jornada de pruebas organizada por el fabricante coreano, hemos tenido ocasión de conducir, por primera vez, la actualización estética y tecnológica que ha sufrido el modelo oriental. Los cambios de diseño afectan a los tres modelos que componen la gama y pasaremos a especificarlos por separado, para una mejor comprensión.
El IONIQ 100% eléctrico estrena parrilla, en una llamativo acabado plateado, así como la rejilla frontal activa, que también dibuja una nueva forma. Las ópticas principales y los pilotos emplean diodos luminosos para todas las funciones, para conseguir la máxima eficiencia energética posible.
De igual forma, las llantas de aleación específicas, con un tamaño de 16 pulgadas, también lucen un diseño actualizado, respecto a la anterior generación.
Si pasamos al IONIQ híbrido, apreciamos una nueva parrilla en forma de panal de abeja en tres dimensiones, así como unas nuevas llantas de aleación de 17 pulgadas. El resto de elementos permanecen invariables.

Por último, el IONIQ híbrido enchufable (plug in hybrid) se beneficia de unas nuevas llantas de aleación de 16 pulgadas, así como de una nueva carta de colores para vestir la carrocería, compuesta por nueve tonos, cuatro de ellos nuevos.

Si pasamos al interior, también apreciamos una evolución en la forma y en la disposición de los elementos. Destacan, sobre todo, la nueva pantalla digital del sistema de infoentretenimiento, con un tamaño de 10,25 pulgadas.
Ocupa una posición flotante en la parte elevada del salpicadero y, debajo de ella, disponemos de los mandos para el sistema de climatización, así como otras teclas de acceso directo a las diferentes funciones disponibles.

Tampoco conviene pasar por alto la nueva instrumentación digital de 7,0 pulgadas, muy útil para mantener informado al conductor sin que apenas aparte la vista de la carretera. Otro detalle significativo es la nueva luz ambiental azulada, que estrena el IONIQ y que poco a poco se irá extendiendo a los futuros vehículos del fabricante coreano.

Si pasamos a valorar los cambios técnicos más significativos, el IONIQ eléctrico estrena una batería con una capacidad de 38,3 kWh, que le asegura un 35% más de autonomía respecto a la anterior generación.
Concretamente, en el mejor de los casos, el vehículo puede recorrer 311 kilómetros, entre recargas, según el ciclo de homologación WLTP. El motor eléctrico desarrolla una potencia máxima de 136 CV.

Obviamente, al tratarse de un vehículo alimentado únicamente por electricidad, te gustará saber que, gracias al nuevo cargador de 7,2 kW, el IONIQ eléctrico es capaz de recargar un 80% de la batería en apenas 57 minutos (siempre que se utilice un punto de carga rápida), mientras que, en un enchufe doméstico, la maniobra de carga completa requiere seis horas y cinco minutos.

La otra gran novedad técnica la encontramos en el IONIQ híbrido enchufable, que adopta una batería de 1,56 kWh y que es capaz de asegurar una autonomía sin emisiones contaminantes, hasta un máximo de 66 kilómetros en ciudad, y hasta 52 kilómetros, en un uso combinado por carretera.
Sin duda, es la opción actual más apetecible de la gama, si tenemos en cuenta que la potencia máxima combinada es de 141 CV, que tiene una autonomía similar a la de un vehículo térmico equivalente y que, además, se beneficia de las ventajas de la etiqueta 0 de la DGT.

Y como no podía ser menos, tratándose de un vehículo moderno, la carga tecnológica y de ayudas a la conducción es más que notable. El denominado paquete Hyundai SmartSense está incluido de serie en todos los acabados, ofreciendo sistemas como el de frenada de emergencia en ciudad (FCA), el control de velocidad de crucero o el de mantenimiento de carril (LKAS), por citar algunos de los más importantes.

Asimismo, gracias al denominado sistema Bluelink, el cliente puede recibir información y activar algunos servicios a través del teléfono inteligente.
Esas funciones se llevan a cabo a través de una aplicación móvil y permiten abrir o cerrar a distancia el vehículo, comprobar el estado de carga de la batería (en el eléctrico y en el híbrido enchufable), programar el inicio de la carga o activar el sistema de climatización con antelación, por ejemplo.

Durante un breve trayecto por los alrededores de Madrid, hemos tenido oportunidad de probar tanto el IONIQ eléctrico como el IONIQ híbrido enchufable. Con el primero, las sensaciones de comfort son excepcionales. No se percibe ningún ruido ni vibración, lo que asegura unos trayectos placenteros para los ocupantes.
Además, hemos podido comprobar, de primera mano, que la autonomía supera holgadamente los 300 kilómetros, lo que te permitirá afrontar viajes de medio recorrido con total confianza. Todo, sin olvidarnos de la útil información que ofrece el sistema de navegación, en términos de puntos de recarga cercanos o de información de servicio (restaurantes, cines, teatros...).

Durante otro recorrido, de similar distancia al primero, también hemos podido disfrutar de las bondades del híbrido enchufable. Se trata de un vehículo que aglutina lo mejor de dos mundos.
En ciudad, es capaz de circular en modo 100% eléctrico durante más de 50 kilómetros, con todas las ventajas que eso conlleva. Pero al salir de ella, las mejores sensaciones de conducir un modelo térmico se hacen palpables, sobre todo, gracias al buen papel que juega la caja de cambios automática de doble embrague 6DCT, con seis velocidades.
Sin duda, la potencia disponible y la posibilidad de disfrutar de una transmisión moderna, ágil y precisa, otorgan al IONIQ híbrido enchufable una ventaja cualitativa frente al resto de rivales de la categoría.

Por último, debemos señalar que los precios arrancan en los 27.045 euros del IONIQ híbrido, asociado al acabado KLASS LE. Cifra que se eleva hasta los 33.425 euros del híbrido enchufable más asequible y que culminan en los 38.575 euros del IONIQ eléctrico más barato.
Estas cifras suponen, aproximadamente, un incremento de 1.500 euros, respecto a las versiones equivalentes de la anterior generación, un aumento justificado por la nueva batería del eléctrico, así como por la nueva tecnología incluida en los tres.
En cualquier caso, también debes saber que las promociones oficiales del fabricante alcanzan, en el mejor de los casos, los 4.200 euros para el modelo 100% eléctrico y para el híbrido, mientras que en el caso del híbrido enchufable, te puedes beneficiar de una rebaja máxima de 2.400 euros.
Hyundai IONIQ PHEV TECNO