Por formato, se encuadra en el segmento B, pero por tecnología, equipamiento y tacto de conducción, debería situarse uno o incluso varios niveles por encima. Ese podría ser un resumen escueto, pero muy clarificador, del Audi A1 Sportback 2019, la segunda generación del utilitario alemán, que analizamos en esta prueba.

La marca alemana siempre ha tratado con mimo al benjamín de la familia, desde su aparición en el año 2010. ¿Cómo? Introduciendo en él soluciones estéticas que luego se han aplicado a otros modelos de la gama y equipándolo como un vehículo de altas aspiraciones.

 

Esta misma fórmula se ha aplicado en esta nueva entrega, en la que las formas curvadas han dejado paso a otras mucho más angulosas, una solución que posiblemente también veamos, en cierta medida, en el próximo A3 Sportback.

Igualmente, el equipamiento resulta asombroso en un vehículo de apenas 4,02 metros. Por citar algunos ejemplos, señalo la instrumentación digital Audi virtual cockpit, las pantallas táctiles de 8,8 o 10,1 pulgadas, la suspensión adaptativa, los faros con tecnología de tipo LED o un sistema de sonido Bang & Olufsen, con 11 altavoces y 560 W.

Todo eso tiene un precio, pero de ese tema ya hablaremos al final del artículo. Ahora, toca recordar que el Audi A1 Sportback 2019 se ha desarrollado a partir de la plataforma MQB A0, la misma que otros modelos del Grupo Volkswagen, como los SEAT Ibiza, Volkswagen Polo y Skoda Scala, entre otros. 

A partir de esta base, se ha creado un modelo mucho más práctico que el anterior... cosa que no era difícil. Las plazas traseras ganan 4,0 centímetros de longitud para las piernas y dos de anchura, unas cotas que lo sitúan en un puesto intermedio dentro de los utilitarios. 

Igualmente, el maletero cuenta con 335 litros, en lugar de los 270 de la primera generación. Si se abaten los asientos traseros, la capacidad alcanza los 1.090. Por si fuera poco, la boca de carga se sitúa más cerca del suelo, para facilitar la operación de carga o descarga.  

Galería: Prueba Audi A1 Sportback 2019 30 TFSI Black line edition S tronic

Además de ser mucho más habitable, el Audi A1 Sportback 2019 muestra también sus mejores galas en el apartado dinámico. De primeras, la postura de conducción es excelente, hasta el punto de que una persona de talla alta como yo apoya bien los muslos en la banqueta, como si estuviera a los mandos de un compacto. 

De este modo, los amplios reglajes del asiento y el volante permiten acomodarnos y sentirnos a gusto rápidamente. Huelga decir que el diseño del habitáculo solo es comparable al del MINI, principalmente por la calidad percibida. 

Para la ocasión, la versión 30 TFSI, representada por un motor turboalimentado de gasolina, con tres cilindros, 1,0 litros y 116 CV, parece propicia para poder salir de la ciudad con garantías.

Al fin y al cabo, esta mecánica también se emplea en SUV compactos y berlinas de otras marcas del gigante alemán, lo que demuestra su destacado rendimiento. Así es, con ella se gana velocidad rápidamente sin tener que apurar el régimen de giro y todo, con mucha suavidad, algo impropio de un propulsor de tres cilindros. 

Este bloque se puede asociar a la transmisión automática de doble embrague DSG, con siete velocidades, cuyo programa convencional abusa de engranar marchas largas, lo que puede dejar algo ahogado al motor en ciertas ocasiones.

Prueba Audi A1 Sportback 30 TFSI 2019
Prueba Audi A1 Sportback 30 TFSI 2019
Prueba Audi A1 Sportback 30 TFSI 2019

En cambio, con el modo Sport activado o empleando las levas, se circula siempre al régimen ideal para completar adelantamientos con seguridad, recuperar velocidad o salir con mucha soltura de curvas lentas. 

Este tipo de uso no fuerza la mecánica, sino que suele impedir que la aguja del cuentarrevoluciones caiga muy por debajo de las 2.000 vueltas. Lógicamente, puede repercutir ligeramente en los consumos, pero lo habitual es rondar los 6,0-6,5 litros cada 100 kilómetros, cifras nada desproporcionadas.

Prueba Audi A1 Sportback 30 TFSI 2019
Prueba Audi A1 Sportback 30 TFSI 2019
Prueba Audi A1 Sportback 30 TFSI 2019

Nuestra unidad de pruebas disfruta de la suspensión deportiva con amortiguadores adaptativos, que se muestra más firme de lo habitual, respecto a otros modelos de Audi. En ningún caso llega a ser extrema y aporta ese toque de diversión tan especial en un vehículo de pequeño tamaño.

También sirve para que el coche viaje perfectamente aplomado a velocidades de crucero y apoye en curvas como si de un buen compacto se tratara. Es más, gracias al bajo peso de la mecánica, el eje delantero se muestra muy ágil y permite cambios de trayectoria en un santiamén.

Es más, incluso en curvas mal peraltadas, el Audi A1 Sportback 2019 no subvira y supera la dificultad siguiendo una trayectoria ideal. Sin desmerecer a sus 'primos', no es justo decir que este vehículo es un Ibiza o un Polo caro, porque el trabajo que hay en el chasis es de primer nivel. 

Prueba Audi A1 Sportback 30 TFSI 2019

Ahora sí, llega el turno de conocer la tarifa de la versión Black line edition, asociada a la transmisión DSG. Este modelo alcanza los 27.680 euros, que puede superar los 30.000 si añadimos extras.

En este apartado, Audi ha aplicado una solución bastante atractiva: crear paquetes de equipamiento opcional, que reducen los costes al cliente. Por ejemplo, el paquete Dynamic permite sumar el control dinámico de la conducción Audi drive select, la suspensión adaptativa y las pinzas de freno pintadas en rojo, entre otros componentes, por 880 euros.      

Es cierto, puede que aun así te parezca un vehículo caro, pero las cifras de ventas en España, durante el mes de mayo, indican que el A1 Sportback 2019 fue el segundo modelo más adquirido de la marca en ese periodo, tan solo por detrás del A3. Con estos datos, muchos críticos tendrán que guardar silencio...

Equipamiento de serie: aire acondicionado, sensores de alumbrado y lluvia, levas del cambio S tronic, spoiler trasero, retrovisores de color Negro Mitos, volante de tres radios acabado en cuero, pantalla táctil de 8,8 pulgadas, llantas de aleación de 17 pulgadas, molduras de las puertas con la inscripción S line, Bluetooth y sistema de sonido con seis altavoces.

Opciones: paquete Dynamic: control dinámico de la conducción Audi drive select, suspensión adaptativa... (880 euros), paquete Vision: faros con tecnología de tipo LED, control de velocidad de crucero Tempomat... (985 euros) y paquete Tech: instrumentación digital Audi virtual cockpit, sensores de aparcamiento traseros... (985 euros).

Audi A1 Sportback 30 TFSI S tronic

Motor Gasolina, 3 cilindros en línea, turboalimentado, 999 cm3
Potencia 116 CV entre 5.000 y 5.500 rpm / 200 Nm entre 2.000 y 3.500 rpm
Caja de cambios Automática de doble embrague S tronic, 7 velocidades
0-100 km/h 9,4 s
Velocidad máxima 203 km/h
Consumo 4,8 l/100 km
Tracción Delantera
Peso en vacío 1.125 kg
Número de asientos 5
Capacidad del maletero 335 l
Precio base 27.680 euros