El Rolls-Royce Amethyst Droptail es uno de los cuatro modelos encargados especialmente para clientes concretos. Su presentación sigue a la de La Rose Noire, que se dio a conocer hace unos días.
Por fuera, esta unidad especial luce una combinación de colores. La flor Globe Amaranth inspiró el púrpura suave, que el fabricante de automóviles combinó con una pintura Amethyst, también púrpura, pero más intenso. El púrpura suave tiene un matiz plateado, mientras que el tono más oscuro mezcla escamas de mica azul, roja y violeta para realzar el brillo.
Galería: Rolls-Royce Amethyst Droptail
Máxima perfección
Las llantas de aluminio pulido de 22 pulgadas lucen un toque de contraste de pintura malva en el interior. El fabricante de automóviles ha producido por primera vez una parrilla en acabado pulido y cepillado a mano. Fueron necesarias más de 50 horas de trabajo colectivo para lograr la uniformidad de los acabados.
Debajo de la parrilla está la toma de aire inferior. Está hecha de un material compuesto ligero que Rolls-Royce imprimió y cuenta con 202 lingotes de acero inoxidable pulidos a mano y pintados con el tono Globe Amaranth.
La aerodinámica cubierta trasera presenta una gran superficie funcional de madera. La empresa afirma que es "la única superficie de madera en bruto del mundo que produce carga aerodinámica" en un coche nuevo.

Interior con madera y cuero
El cliente planteó al fabricante de automóviles el reto de diseñar un cristal electrocrómico para el techo que pudiera cambiar de tonalidad. Rolls tuvo que experimentar con 60 iteraciones de cristal antes de quedar satisfecho. El cristal es completamente opaco cuando está desactivado, presentando un tinte púrpura. Cuando es translúcido, tiene una tonalidad que combina con los asientos de cuero marrón Sand Dunes del interior.
En la cabina, la madera oscura y el cuero en contraste se mezclan con suaves tonos morados. El fabricante de automóviles probó todas las maderas para asegurarse de que cumplían las mismas normas de resistencia que las piezas exteriores. La empresa probó más de 150 muestras durante más de 8.000 horas antes de la construcción final del coche, exponiéndolas a la luz solar, la lluvia y las fluctuaciones de temperatura.
Reloj de Vacheron Constantin
El reloj central del salpicadero procede de Vacheron Constantin y ha sido fabricado a mano en Ginebra con un movimiento de cuerda manual. El propietario puede desmontar el reloj y guardarlo separado del vehículo. Vacheron Constantin colaboró estrechamente con Rolls-Royce en el diseño de dicho reloj, incorporando el color amatista con una placa base de oro blanco.
Sin duda, los modelos Droptail de Rolls-Royce ayudan a ejemplificar su línea de coches hechos a mano y a medida. El año pasado, la marca reveló que tenía el mayor valor de encargos de su historia, con lo cual las cosas le van rodadas.
Fuente: Rolls-Royce