Ford lanzó un icónico superdeportivo al mercado en el año 2005, el Ford GT, para conmemorar sus célebres victorias en las 24 Horas de Le Mans de la década de los 60, pero también, como homenaje el centenario de la empresa.
Ford apenas fabricó algo más de 4.000 de estos coches, lo que hoy en día los hace raros y valiosos. Por eso, en parte, es tan satisfactorio ver cómo este Ford GT 'olvidado', recibe el cariño que necesita en este vídeo del canal de YouTube de Ammo NYC.
Hablamos de un GT clásico del propio año 2005, acabado en color blanco con rayas azules, que se quedó a la intemperie después de que su propietario falleciera repentinamente. Sólo tiene 2.500 millas en el marcador (poco más de 4.000 km), pero su exposición a los elementos le ha pasado factura.
Un superdeportivo abandonado... y ahora a la venta
Exteriormente, se puede ver que la pintura está desgastada y que hay hojas depositadas en cada rincón exterior del coche. Pero peor aún, queda claro que hay signos de ratones viviendo en su interior.
Galería: Ford GT (2005-2006)
Ahora, según parece, el hijo del fallecido propietario del GT planea limpiarlo y revisarlo antes de ponerlo a la venta en Cars & Bids. Una acción que parece bastante inteligente.
A fin de cuentas, la mayoría de los Ford GT viven mimados, escondidos en garajes y expuestos en ferias de coches. Según Hagerty, su valor oscila entre 380.000 y 430.000 dólares en buenas y excelentes condiciones, mientras que los mejores ejemplares alcanzan un valor de 500.000 dólares. Cifras que, al cambio actual, se mueven entre los 347.000 y los 456.500 euros.
El trabajo empieza por aspirar el maletero antes de lavarlo a presión, así como el vano motor y propio el exterior. Es impactante la cantidad de suciedad y restos que hay en este coche. A simple vista, parecía mucho más limpio de lo que realmente está...
Tras incontables horas de limpieza y detallado, el Ford GT queda como prácticamente nuevo. Incluso, al final del vídeo, puede verse el coche rodando y, la verdad, luce impresionante...
Fuente: Ammo NYC vía YouTube