Existen preparadores y luego está BRABUS. La empresa con sede en Bottrop siempre se esfuerza al máximo para extraer hasta la última gota de rendimiento de un Mercedes-AMG.
Menos de un año después de dotar al E 63 S con casi 800 CV de potencia, el especialista ha vuelto con una construcción aún más potente. En esta ocasión, han ido más allá y han aumentado la cilindrada del bloque V8 de 4,0 a 4,5 litros.
BRABRUS también instaló pistones más grandes, un cigüeñal personalizado y ocho bielas hechas a medida para alargar la carrera a 100 milímetros. Además, el preparador dispuso su propio par de turbocompresores con una presión máxima de sobrealimentación de 1,4 bares.
Galería: BRABUS 900 basado en Mercedes-AMG E63 S
Asimismo, el bloque V8 respira ahora a través de un nuevo sistema de escape fabricado completamente en acero inoxidable, mientras que la admisión modificada mejora el suministro de aire fresco.
El resultado final es un V8 biturbo de 4,5 litros que rinde unos asombrosos 888 CV a partir de 6.200 rpm y la 'brutalidad' de 1.250 Nm de par motor disponibles a partir de 2.900 vueltas, lo que equivale a registros de superdeportivos.

Sin embargo, el par motor se ha limitado electrónicamente a 1.050 Nm, ya que BRABUS quiere proteger la transmisión. Con el nuevo aporte 'muscular', la superberlina de Affalterbach solo necesita 2,9 segundos para alcanzar los 100 km/h desde parado.
¿No tienes suficiente? BRABUS dice que el cohete alemán tarda 9,7 segundos en pasar de 0 a 200 km/h y 23,9 segundos en alcanzar los 300 km/h. A fondo, llega a los 330 km/h, que también están limitados para proteger los neumáticos.

Hablando de ese apartado, el E 63 S monta llantas forjadas de 21 pulgadas con gomas Continental de 265/30 ZR21 delante y 305/25 ZR22 detrás, por si necesitas disponer de todos los datos técnicos.
En comparación con el vehículo de serie, el preparador alemán ha rebajado la altura del Mercedes-AMG a la carretera unos 20 milímetros para conseguir una conducción más deportiva.

Al igual que la versión del año pasado, el E 63 S adopta un siniestro aspecto totalmente negro, aunque el interior se puede modificar de infinitas maneras, ya que BRABUS es capaz de "cumplir los deseos más extravagantes de los clientes". ¿Aún quieres ese AMG GT 63 S E Performance?