La factoría de Nissan en Sunderland, Reino Unido, celebra este año su 35 aniversario y, para conmemorar la ocasión, la marca japonesa ha decidido convertir en eléctrico un modelo clásico que en su día salió precisamente de la línea de montaje de esta planta inglesa.

Este proyecto one-off, totalmente único, es un Nissan Bluebird que ahora la maca denomina Newbird, y que han convertido en un vehículo cero emisiones, 100% eléctrico. Y ya puedes imaginarte cómo lo han hecho.

Galería: Nissan Newbird

Efectivamente, han utilizado la base técnica del Nissan LEAF, por lo que este Newbird esconde un motor eléctrico y una batería de 40 kWh, aunque no sabemos qué potencia exacta declara, ya que anuncia un 0 a 100 km/h de 15,0 segundos, mucho más lento (casi el doble) que el del LEAF.

En este caso, los módulos de la batería se han instalado entre el vano motor y el maletero, suponemos que en el suelo del vehículo, y según la marca, han hecho falta extensivas modificaciones en el chasis y la carrocería del Bluebird. La suspensión, por ejemplo, se ha rediseñado por completo.

Nissan Bluebird eléctrico
Nissan Bluebird eléctrico
Nissan Bluebird eléctrico

En principio, la recarga es posible a un máximo de 6,6 kW, y Nissan estima que la autonomía real podría ser de unos 210 kilómetros, aunque lógicamente no se ha homologado, ya que no es un vehículo apto para circular en carretera abierta.

A nivel estético, el Bluebird tiene un aspecto muy similar al del modelo de serie, aunque en este caso en el lugar de la tapa del depósito de combustible, lo que encontramos es la toma de recarga para la batería, y lo mismo ocurre con el indicador de nivel de combustible, que ahora indica el nivel de carga.

Nissan Bluebird eléctrico
Nissan Bluebird eléctrico
Nissan Bluebird eléctrico

El único rasgo que deja claro que estamos ante una máquina de cero emisiones, y que por tanto no se trata de un Bluebird original, es el logotipo retroiluminado de Nissan en la calandra. 

Cabe indicar que la transformación eléctrica ha sido llevada a cabo no por la propia Nissan, sino por una compañía familiar especializada en este tipo de retrofits eléctricos, denominada Kinghorn Electric Vehicles.