Puede que Nissan no esté pasando por su mejor momento, precisamente, pero el fabricante japonés tiene intención de apoyarse en la electrificación de su gama para labrarse un futuro más prometedor.
Así lo ha anunciado recientemente mediante su plan Ambition 2030, junto al cual han presentado cuatro curiosos e interesantes prototipos de cero emisiones, denominados Nissan Chill-Out, Nissan Max-Out, Nissan Surf-Out y Nissan Hang-Out.

Estos prototipos, todos 100% eléctricos, son conceptos muy diferentes entre sí. Mientras que el Chill-Out toma la forma de un todocamino, el Max-Out es un biplaza descapotable, el Surf-Out es un pick-up más aventurero y el Hang-Out es una mezcla entre SUV y todoterreno, también para la aventura.
Un plan ambicioso
Durante los próximos años, Nissan planea invertir unos 15.625 millones de euros (2 billones de yen) para acelerar la electrificación de su catálogo y la innovación tecnológica. Para 2026, Nissan espera que el 75% de sus ventas en Europa correspondan a modelos electrificados.


La firma pretende lanzar 23 nuevos modelos electrificados en lo que queda de década, de los cuales 15 serán vehículos totalmente eléctricos. Además, la empresa prevé conseguir la neutralidad de carbono en todo el ciclo de vida de sus productos para el año 2050.
Para conseguir estos ambiciosos objetivos, Nissan continuará mejorando su tecnología de baterías de iones de litio, pero también pretende lanzar tecnología de baterías sin cobalto, lo que para 2028 debería reducir el coste de las mismas en un 65%.


La marca también quiere aumentar su capacidad de producción de baterías a nivel mundial, pasando de unos estimados 52 GWh en 2026 a un total de 130 GWh en 2030.
Para ese mismo año, la marca quiere presentar un eléctrico con batería de estado sólido, una tecnología que todavía está en desarrollo, pero cuyo coste Nissan pretende haber reducido en 2028 hasta los 75 dólares por kWh y, en el futuro, hasta 65 por kWh, igualando así los costes de un vehículo equivalente de gasolina.